El Mediterráneo es el centro de la exposición ‘La Mer au Milieu des Terres // Mare Medi Terraneum’ que acababa de inaugurar Es Baluard.
El Mediterráneo, etimológicamente «madre midi tierra», el mar en medio de las tierras, se presenta como una cuenca aparentemente cerrada que en realidad se abre al oeste por el estrecho de Gibraltar. Un espacio que ha sido siempre cruce de culturas mesopotámica, cartaginesa, bereber, semítica, persa, fenicia, griega y romanas cuna de religiones: judía, cristiana e islámica. Este mar fue y es asimismo la cuna económico y cultural de naciones incipientes, favorecido por los intercambios marítimos que permitieran la supremacía de la llamada civilización occidental. Territorios de la diversidad que cuestionan la idea de frontera y transforman los modelos de identidad y de las figuras políticas surgidas a partir de los acontecimientos revolucionarios.
Es Baluard se sumerge en el mar que baña las Baleares con una exposición comisariada por Cécile Bourne-Farrell, que tiene por objetivo revelar la mirada crítica y real de determinados artistas sobre un espacio que es el hábitat de todas las civilizaciones del mundo reunidas en las aguas compartidas del Mediterráneo. Tan lejos y tan cerca, la actualidad sobrepasa el presente, el arte lo que procura proponer es una cierta distancia imprescindible en el epicentro de lo que liga a los hombres con la tierra y el mar, sobre o bajo el nivel de el agua, desde hace milenios.
No pasa ni un solo día sin que se aluda en el Mediterráneo como un drama y no como un espacio participativo y de cultura. Lejos es el Mediterráneo de Braudel, sus maravillosas descripciones de paisajes se han convertido en destinos turísticos y Palma de Mallorca no es una excepción. Por su situación y insularidad, Mallorca se encuentra en el corazón de este mar occidental y oriental los accesos del que generan la vez atracción y rechazo a una Europa contemporánea cada vez más proteccionista. Este proyecto curatorial no tiene por objeto ilustrar el Mediterráneo sino ofrecer una mirada distinta sobre aquellas regiones milenarias y proponernos ser actores potenciales de algunas prácticas y situaciones del Mediterráneo. Este maraña de prácticas y situaciones son las que privilegian la observación razonada, el conocimiento y la negociación, que siguen siendo el motor esencial de encuentros entre mundos que se ignoran y que se manifiestan en estas aguas y en el litoral.
Los artistas seleccionados y sus obras acometen este planteamiento desde vertientes diferentes: Ali Cherri, Marcel Dinahet, Lara Fluxà, Chourouk Hriech, Bouchra Khalili, Yazan Khalili, Farah Khelil, Ange Leccia, Rogelio López Cuenca, Geoffroy Mathieu & Bertrand Stofleth, Antoni Muntadas, Hervé Paraponaris, Marco Polonio, Zineb Sedira, Oriol Vilanova, Yorgos Zois.
