Para que las tradicionales matanzas sean totalmente seguras a nivel sanitario en relación al consumo de la carne de cerdo, se ha iniciado una campaña de prevención de la triquinosis, una enfermedad parasitaria que se trasmite por la ingesta de carne cruda o poco cocinada con larvas o quistes de triquina y que puede provocar vómitos, diarreas, dolor muscular y fiebre.
La campaña tendrá lugar entre el 1 de noviembre de 2015 al 30 de marzo de 2016 con el objetivo de garantizar que los productos elaborados a partir del ganado porcino, sacrificado para el consumo doméstico privado, sean seguros y no transmitan la triquinosis.
Para evitar que se pueda desarrollar esta enfermedad, el Decreto 34/2009, de 19 de junio, establece unas normas para el control sanitario de animales de la especie porcina que se destinan al consumo privado.
El Ayuntamiento de Marratxí ha querido recordar las pautas que deben seguir todas las personas que vayan a sacrificar animales para el consumo humano. Para ello se debe aportar las muestras de carne de cada animal sacrificado en la forma, tiempo y lugar que indique el veterinario colaborador y pagar los costes del análisis triquinoscópico inicial y del de la destrucción de la carne y los productos cárnicos que se declaren no aptos.
Se entiende que pueden sacrificar animales de la especie porcina para el consumo doméstico privado, si se someten a un análisis de detección de triquina.
Los productos resultantes de la matanza, así como la carne obtenida, se deben destinar al consumo privado directo quedando prohibida su venta, tanto frescos como curados.
*Relación de veterinarios colaboradores del Ajuntament de Marratxí en la campaña 2015-2016 de sacrificio de cabezas de ganado porcino para el consumo doméstico privado:
