La1 estrena este martes ‘Ana Tramel. El juego’ un trepidante thriller protagonizado por Maribel Verdú, Natalia Verbeke y Unax Ugalde.
La1 apuesta por la serie ‘Ana Tramel. El juego’ para la noche de los martes. La ficción, que estuvo nominada en el Festival de Montecarlo a la Ninfa de Oro es un trepidante thriller de investigación judicial. Se basa en la novela ‘Ana’ de Roberto Santiago y se adentra en el mundo del juego para mostrar la adicción que provoca y sus consecuencias.
Ana Tramel (Maribel Verdú) es una brillante abogada que resurge de sus cenizas para ayudar a su hermano, acusado de asesinar al director del casino Gran Castilla. Rodeada de un pequeño equipo de confianza, se tendrá que enfrentar a una enorme corporación de la industria del juego. Completan el reparto Natalia Verbeke, Israel Elejalde, Luis Bermejo y Unax Ugalde junto a Joaquín Climent, Tomás del Estal, Elvira Mínguez, Víctor Clavijo, María Zabala, Biel Montoro y Bruno Sevilla.
Roberto Santiago, escritor, guionista y director de cine, es el creador y también guionista junto a Ángela Armero.
Los capítulos están dirigidos por Salvador García Ruiz (‘Isabel’, ‘La caza. Monteperdido’) y Gracia Querejeta (‘Invisibles’, ‘Sin identidad’, ‘Felices140’, ‘15 años y un día’, ‘Siete mesas de billar francés’).
La ficción está coproducida por RTVE y la alemana ZDF Enterprises, junto a Tornasol y DeAPlaneta.
Ángela Armero y Gracia Querejeta son coguionista y codirectora.
ASÍ SE INICIA LA SERIE
Ana Tramel es una mujer fuerte, brillante abogada que ha caído en una espiral auto destructiva. Adicta a los tranquilizantes, se gana la vida recurriendo multas en el bufete de su mejor amiga Concha (Natalia Verbeke), otra luchadora que se enfrenta a sus demonios particulares.
Un día recibe una llamada que cambiará su vida para siempre: su hermano Alejandro acaba de ser detenido acusado de asesinar al director del Gran Casino de Robredo y necesita que le defienda
En su visita al calabozo, conoce al teniente Moncada, el encargado de la investigación y con el que existe una atracción mutua. Allí descubre que Alejandro tiene una familia que ella no conocía: su mujer es Helena, una joven ‘stripper’ rusa con la que tiene un hijo de dos años, Martín.
Al comenzar la investigación con su equipo, Ana descubre que su hermano estaba enganchado al juego y anegado por las deudas. Decide hacerse cargo del caso y volver a ponerse la toga después de cinco años sin pisar un tribunal.