Los jugadores del CB Es Pla han recibido el reconocimiento con mucha emoción, recordando el compañerismo y la pasión por el deporte de todos los jugadores.
Este miércoles en las fiestas de Es Pla de Na Tesa se ha rendido homenaje a veinticuatro jugadores del Club Bàsquet Es Pla que, en verano de 1993, entraron en el libro Guinness de los récords por haber disputado el partido de baloncesto más largo en el ámbito mundial en ese momento.
Con motivo de este treinta aniversario, el Ayuntamiento de Marratxí ha entregado unos siurells especialmente elaborados para la ocasión. Las figuritas, con una pelota de baloncesto en la mano, conmemoran las 26 horas, 12 minutos y 41 segundos de partido que ha dejado el nombre del club de baloncesto de Es Pla de Na Tesa para siempre en el libro de los récords mundiales.
El alcalde de Marratxí, Jaume Llompart, muy vinculado al CB Es Pla, ha reconocido la gesta de los organizadores Guillem Massot, Angel Molinero y el entonces presidente del CB Es Pla, Tomeu Munar. Llompart ha agradecido el trabajo de la actual directiva del club y la de entonces: «mucho del espíritu del pueblo es gracias a las personas que hicieron posible el récord».
La consecución de este hito fue un reflejo de los valores del equipo: «el esfuerzo por conseguir un objetivo, la unidad y la pasión de unos amigos apasionados por el deporte». “Recordar estas citas contribuye a potenciar el deporte en el futuro». Así lo ha asegurado Angel Molinero que, con sólo 20 años, fue uno de los organizadores junto al también jugador, Guillem Massot.
Para Massot «es una alegría volvernos a reunir para recordar lo que vivimos hace 30 años. Con 21 años nos trataban de locos, nadie lo tenía claro, pero la pasión por el baloncesto, el compañerismo y el gran ambiente vivido en la pista del Janer Manila fueron suficientes para conseguirlo».
Tomeu Munar, presidente del Club Baloncesto Pla en el momento del récord Guinness e impulsor del baloncesto en Marratxí, comenta que después de tantos años todavía guardan un recuerdo de la “camaradería y buen clima que se respiró y la satisfacción del reto conseguido «.
Munar ha alabado la iniciativa y el impulso de Guillem Massot y de Angel Molinero, que hicieron posible el récord junto a sus compañeros.
Y es que estas dos figuras del baloncesto en Marratxí reunieron a «los mejores jugadores de las Islas de aquel momento» y, una vez conseguido el hito, «el Club Bàsquet Pla aún fue más reconocido». Como ciudadano de Pla de Na Tesa, Munar admite sentirse «muy orgulloso de que Es Pla haya salido en un párrafo del Libro de los récords Guinness a nivel mundial».