La Policía Nacional y la Dirección General de Comercio y Empresa han realizado, este sábado 5 de octubre, una operación conjunta contra el juego clandestino, en un domicilio particular en la zona de Secar de la Real de Palma.
Investigaciones realizadas por agentes de la Policía Nacional de la Jefatura Superior de Policía de las Illes Balears, constataron que en una página de Facebook se publicitaba la organización de un torneo de póquer en una vivienda de Palma sin la autorización administrativa correspondiente. Cada jugador debía abonar 40 euros para los premios y 5 euros para el organizador, que se encargaba de proporcionar comida y bebida a los asistentes durante la jornada.
El morador de la vivienda era el organizador de la partida y convocó a 32 personas a través de esta red social. Entre las 33 personas identificadas por la Policía, había dos chicas para hacer las labores de croupier. La mayoría de los identificados justificaron ante los agentes ser amigos o conocidos del dueño de la casa en la que se iba a desarrollar el torneo de póquer. Algunos de ellos afirmaron que únicamente pasaban por allí.
El organizador, a través de Facebook, avanzó a los participantes detalles del evento, y pidió colaboración para transportar una mesa de póquer, además de anunciar que posiblemente podrían contar incluso con una camarera para servir la comida.
Una vez montado un dispositivo de vigilancia en las inmediaciones del domicilio, se pudo constatar cómo, antes del inicio de la partida, el morador de la vivienda recibía la mesa de póquer, tal y como adelantó en la red.
Sobre los jugadores podrían caer multas de 6.000 euros, mientras que sobre el organizador de la partida podría caer una sanción de más de 60.000 euros.