La Policía Local de Palma ha detenido a un hombre de 55 años por coacciones, amenazas de muerte, allanamiento de morada y hurto.
Los hechos ocurrieron este viernes de madrugada en la Avenida Argentina de Palma. A la 1 de la madrugada, un hombre se presentó en las dependencias policiales de Sant Ferran para denunciar que el propietario de la vivienda que tenía alquilada había amenazado con prender fuego al domicilio si los inquilinos no lo abandonaban. Entre los ocupantes del inmueble se encontraban su esposa y otra persona.
Ante la gravedad de los hechos, varias unidades de la Policía Local se desplazaron al lugar, donde encontraron a la esposa del denunciante esperando fuera de la vivienda, visiblemente asustada. La mujer informó que el propietario les había cortado el suministro eléctrico a las 21 horas, en represalia por no haber logrado desalojarlos anteriormente.
Asimismo, explicó que mientras su marido formalizaba la denuncia, había recibido más amenazas a través de una aplicación de mensajería instantánea, en las que el casero les advertía que, si no abandonaban el lugar antes de las 3 de la madrugada, atrancaría las puertas y prendería fuego al piso con ellos dentro.
Los agentes accedieron al domicilio con el consentimiento de la mujer y localizaron al propietario, español de 55 años, que inicialmente negó las acusaciones. Se verificó que los mensajes amenazantes habían sido enviados desde su teléfono móvil. Además, reconoció haber cortado el suministro eléctrico debido al impago de parte del alquiler.
Otro inquilino, también presente en la vivienda, relató a los agentes que días atrás el propietario lo había obligado a abandonar el domicilio por una deuda de 70 euros. Tras saldar la deuda y regresar, descubrió que faltaban varias de sus pertenencias, entre ellas un televisor y ropa, valorados en aproximadamente 2.000 euros.
Ante estos hechos, los agentes lo detuvieron como presunto autor de los delitos de coacciones, amenazas de muerte, allanamiento de morada y hurto.