En vísperas del segundo aniversario de la ley 8/2016 para garantizar los derechos de Lesbianas, Gays, Trans, Bisexuales e Intersexuales y para erradicar la LGTBIfobia las mujeres transexuales , afirma Ben Amics, “continúan sin derecho a acceder a las cirugías de reasignación genital
La normativa autonómica aprobada por el Parlament de les Illes Balears el 17 de mayo de 2016 continua, afirma la asociación de LGTBI, Ben Amics, sin estar en plena aplicación en el ámbito de la salud “y es que son una quincena las mujeres transexuales que siguen esperando a que se resuelvan los trámites burocráticos que les imposibilita el acceso a las cirugías de reasignación genital”.
Hace ya un año que desde la Conselleria de Salud se anunció que se iban a derivar a todas las mujeres transexuales en lista de espera al BarnaClinic con tal de evitar las largas listas de espera que se estaban produciendo en el hospital de referencia, en Málaga. Ante dicha noticia desde Ben Amics se mostró total satisfacción y alegría ya que suponía “aliviar años de espera, angustia y sufrimiento por parte de todas las mujeres afectadas, algunas de ellas en lista de espera desde 2009”.
Sin embargo, la asociación de LGTBI considera que “un año después continuamos esperando la resolución de procesos burocráticos y la homogeneización de las prácticas sanitarias respecto a las personas trans a través de un protocolo que lleva ya más de seis meses paralizado”.
Se ha de tener en cuenta, aclara Ben Amics, “que la acomodación genital supone un elemento fundamental para muchas mujeres transexuales que sienten que sus derechos son ninguneados y sienten la impotencia respecto a la falta de transparencia, la dilatación de los tiempos y la inacción de la Conselleria de Salud ante sus constantes peticiones y reclamaciones. La espera de esta cirugía, además, genera mayores dificultades en la autoestima de las propias afectadas, así como situaciones de angustia, estrés y depresión. A esta situación se añade que aún sabiendo que no se realizarán las cirugías en Málaga, se continúa derivando allí a estas mujeres a revisiones rutinarias como pueda ser la realización de analíticas de sangre, con los costes de desplazamiento y dietas que ello conlleva para el IB-Salut”.
Para finalizar, Ben Amics se lamenta de “las largas listas de espera a través del sistema actual suponen prácticamente el descarte de aquellas mujeres más mayores que por cuestiones de edad y salud no podrán acceder a dichas cirugías por los riesgos que conllevan las mismas, si no se toman medidas urgentes”.