El nuevo plan de asistencia y ayuda domiciliaria de los Servicios Sociales del Ajuntament de Marratxí ha sido la vía de conflicto entre el equipo de gobierno y la oposición de los Populares. Los momentos de tensión en el pleno empezaban con la exposición inicial de los reglamentos del Servicio de Atención Domiciliaria y de la Unidad de Trabajo Social.
En la primera de ellas, el Partido Popular ha votado en contra y en la segunda se han abstenido, mientras que el equipo de gobierno y los Independents de Marratxí – El PI han votado a favor.
“Un pasito palante, un pasito patrás”
Tanto la ayuda a domicilio como la atención y el nuevo reglamento de comidas a domicilio, regulado a través de Cruz Roja después de haber sido subrogado al 50% durante la anterior legislatura, abrió la caja de los truenos en el pleno de este martes.
Aina Amengual, regidora de Serveis Socials i Educació, explicó que se aumentan las horas de manera proporcional al grado de dependencia del usuario, que los pagos se ajustan a la renta de la persona atendida y que se amplía el servicio con cenas (si lo requieren), custodia de llaves (para personas con problemas de movilidad o sordera, por ejemplo) y revisión de neveras para eliminar los alimentos caducados o en mal estado.
El servicio se ofrece durante todos los días del año y tiene comidas especiales en fechas señaladas. Pero esto no le pareció ‘real’ a la oposición. Xisco Ferrà, portavoz del PP, quiso hacer notar que “este servicio representa un paso atrás porque los funcionarios no van a prestar sus servicios por las tardes ni los domingos con lo que, en vez de sumar, reducen al 50% el servicio de lunes a viernes y un 75% los fines de semana”.
Según el alcalde Canyelles, “no dejamos a nadie fuera, y para que haya más personal, llamen ustedes a Montoro y que nos permita incrementar la contratación. De todas maneras no hay servicio por las tardes porque nadie lo ha solicitado, y lo mismo pasa con los domingos”.
Que sí, que no, que caiga un chaparrón…
“Si hubieran añadido esta puntualización de ampliar el servicio según la demanda, nosotros les hubiéramos apoyado”, dijo Ferrà. Entraron al trapo varios regidores y le costó un rato al alcalde conseguir que se siguiera con el Orden del Día, pero con el siguiente punto se volvió a reavivar el debate.
Era la aprobación inicial del Reglamento municipal de la Unitat de Treball Social de l’Ajuntament de Marratxí, punto explicado por la regidora Amengual. Había que aprobar la acreditación de los puntos ante el IMAS para poder registrarlos en plazo. Ferrà aprovechó para retomar la discusión anterior, y finalmente el grupo se abstuvo en la votación.
Una información de Blanca Garau
Crec que no és de rebut titular «Un pasito palante, un pasito patrás» en un tema tan delicat com aquest, sincerament. És vergonyós que es posin pals a les rodes als assumptes socials, com fa el PP. I no defens els gestors actuals, perque com es pot veure no és un servei del tot satisfactori i no es donen totes les respostes com toca, amb un desinterès preocupant de la regidora de l’àrea, que sí surt a les fotos però no atén a l’àrea. Gràcies per aquest espai
Ayer estuve en el pleno, y fue vergonzosa la actitud que tuvo el Señor Alcalde de Marratxi hacia el Grupo Municipal Popular.
Me gustaria que la educación prevalezca en todos los sentidos.