El Govern interviene la residencia privada de atención a personas mayores Seniors Inca para frenar los contagios de Covid-19 y garantizar la atención adecuada a los usuarios.
La Conselleria de Salud y Consumo, de acuerdo con el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS), ordenó este sábado la intervención de la residencia privada de ancianos Seniors Inca para frenar los contagios de COVID-19, que afectan 32 usuarios y 6 trabajadores, y garantizar la atención adecuada a los residentes.
En el centro, que tiene 113 usuarios y 76 empleados, permanecen en estos momentos 101 usuarios, ya que 12 han sido hospitalizados.
Como parte de las tareas de vigilancia permanente y coordinada que Govern y Consell de Mallorca hacen de la evolución de la pandemia de COVID-19 en las residencias de ancianos, el día 12 se cribó la residencia Seniors Inca y todos los resultados fueron negativos.
Posteriormente, el pasado miércoles, día 23 de septiembre, los profesionales del Servicio de Salud detectaron un usuario con infección por SARS-CoV-2 y otros 42 residentes fueron considerados contacto estrecho.
Después de realizar las pruebas pertinentes, el sábado día 26, se confirmó que 32 residentes se habían contagiado, es decir, el 28 por ciento del total. Asimismo, se identificaron 6 trabajadores positivos. A la espera de tener todos los resultados definitivos se consideró oportuno mantener aisladas a todas las personas residentes de manera preventiva.
Además, la subdirección de cronicidad solicitó a la Consejería de Salud y Consumo la intervención del centro para organizar todos los procesos sanitarios necesarios para prevenir la expansión del SARS-CoV-2, asegurar una vigilancia activa eficaz los pacientes que quedan en el centro y dar apoyo sanitario mientras haya personas infectadas de Covid-19, o con sospecha de COVID-19 que sean vulnerables.
La consejera de Salud, Patricia Gómez, ordenó intervenir, durante 20 días, el control de la gestión sanitaria asistencial en relación a todos los procesos relacionados con la COVID-19 de este centro de servicios sociales de carácter residencial.
Asimismo, se ha designado una coordinadora sanitaria, cuyas funciones son las de control, coordinación y dirección de la actividad asistencial sanitaria del centro, dirigiendo el equipo de personal de la residencia y en su caso, el asignado por el Servicio de Salud de las Islas Baleares.
A partir de ahora, el personal, el equipo directivo y la titularidad de este centro, así como los propios residentes, se regirán por las instrucciones, órdenes y disposiciones que emita la coordinadora.
Desde el principio de la pandemia, el equipo de coordinación sociosanitaria formado por directivos de los consejos insulares de Menorca, Eivissa y Formentera, del IMAS y de las consejerías de Servicios Sociales y Deportes y de Salud y Consumo hacen un seguimiento diario de la situación los centros, que han disponer de un plan de contingencia y cumplirlo.
Hay que recordar que, hace una semana, el Govern decidió la intervención de la residencia privada Bell Entorn, ubicada en Sóller y, anteriormente, este seguimiento de la situación en los centros ya llevó a la intervención de otras dos residencias: Oasis y Domus vi Palma.
En estos momentos, en las residencias de Baleares hay 4.318 residentes, de los cuales 181 son positivos. De estos, 105 se encuentran hospitalizados y el acumulado de personas muertas es de 141. En cuanto a los profesionales, hay 78 positivos activos.