En verano hay que extremar el cuidado con la fecha de caducidad de los alimentos que se van a ingerir ya que el calor propicia que se estropeen con mayor facilidad. Por ello, desde el Servicio de Seguridad Alimentaria y Nutrición de la Dirección General de Salud Pública y Participación del Govern se hace hincapié en la importancia de revisar las fechas de consumo que figuran en los envases de los alimentos. Además, recalca la obligación que tienen los comercios minoristas de etiquetar correctamente los envases que preparan para la venta inmediata. En este sentido, en lo que llevamos de 2016 se han incoado 11 expedientes por defectos en el etiquetado. No se debe comer ningún alimento pasada la fecha de caducidad porque puede existir un peligro real para la salud, un riesgo de intoxicación.
Los responsables de Seguridad Alimentaria destacan que obligatoriamente todos los alimentos envasados tienen que informar al consumidor de las fechas de consumo y recomienda a los ciudadanos que, a la hora de comprar un alimento previamente envasado, envuelto o embolsado, se aseguren de que lleva una etiqueta que indica cuál es la fecha de consumo mínima o fecha de caducidad de aquel alimento. En lo que va de año se han incoado 11 expedientes por defectos en el etiquetado.
Fecha de consumo preferente y fecha de caducidad
La vida útil de un alimento es el periodo de tiempo durante el que el alimento mantiene una adecuada calidad y seguridad, siempre y cuando se hayan respetado las condiciones de conservación indicadas en la etiqueta.
La vida útil depende de las características del tipo de producto, proceso de producción y técnica de conservación utilizada. La fecha de consumo preferente indica el momento hasta el que el alimento se conserva con la calidad prevista. Después, el alimento sigue siendo seguro para el consumidor siempre y cuando se respeten las instrucciones de conservación y el envase esté en buenas condiciones. No obstante, el producto puede perder la calidad, sabor, olor, textura o propiedades nutricionales. Suelen indicar fecha de consumo preferente los alimentos desecados (pasta, arroz, etc.), enlatados y otros como el aceite vegetal, chocolate, porque microbiológicamente son más estables.
Cabe tener en cuenta que una vez abierto un producto con fecha de consumo preferente tienen que seguirse las instrucciones que aparecen en la etiqueta: “Consumir en X días una vez abierto”.
Por otra parte, la fecha de caducidad indica el momento hasta el que el alimento puede comerse de forma segura. No se debe comer ningún alimento pasada la fecha de caducidad porque puede existir un peligro real para la salud, un riesgo de intoxicación. Llevan fecha de caducidad en vez de fecha de consumo preferente alimentos muy perecederos, los alimentos en los que se dan las condiciones adecuadas para el crecimiento microbiano, como el pescado fresco, carne picada, ensaladas preparadas, quesos frescos o de pasta blanda, salmón ahumado, etc.
Asimismo, se remarca la importancia de seguir las instrucciones de conservación (temperatura) para evitar que se modifique el contenido microbiológico del alimento y se estropee antes de tiempo y producir una intoxicación alimentaria. Corresponde a la empresa alimentaria determinar la fecha de caducidad o consumo preferente de los alimentos que ponga al alcance del consumidor en función de los estudios y análisis que obligatoriamente realiza, conforme a los criterios alimentarios de seguridad alimentaria establecidos en la normativa sanitaria de aplicación.
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