La diputada Marga Durán ha recriminado al conseller que “durante toda la tramitación ha dicho que esto no iba a ser una ley de lenguas para finalmente imponer la inmersión”
El Grupo Parlamentario Popular ha votado en contra de todos los artículos de la Ley de Educación “por la decisión del Govern Armengol de romper el consenso”
La diputada del Grupo Parlamentario Popular (GPP) Marga Durán ha reprochado al conseller d’ Educació, Martí March, que “por su culpa, no habrá una Ley de Educación de consenso en Balears”. En este sentido, ha argumentado que “durante toda la tramitación ha dicho que esto no iba a ser una ley de lenguas para finalmente imponer la inmersión”.
De hecho, Durán ha justificado el voto en contra del GPP a todos los artículos de la Ley de Educación “por la decisión del Govern Armengol de romper el consenso” al que se había llegado; en especial para que, a iniciativa del Partido Popular, el castellano fuese una lengua vehicular en los centros educativos de Balears.
“El Partido Socialista tendrá que explicar por qué no quiere que haya un mínimo de castellano, como lengua en la enseñanza de las islas, por qué no quiere que el castellano sea lengua vehicular en la enseñanza; tendrá que explicar por qué hace seguidismo del modelo lingüístico de Cataluña contrario a la Constitución española y por qué no quiere cumplir las sentencias”, ha recalcado Durán.
Además, la diputada del PP que defiende los temas de Educación en el Parlament, ha hecho hincapié en que “el Partido Socialista tendrá que explicar por qué no quiere las modalidades lingüísticas propias, de Mallorca, Menorca, Eivissa y Formentera, establecidas en el Estatut d’ Autonomia, por qué no quiere una lengua extranjera como lengua de enseñanza y aprendizaje de contenidos curriculares no lingüísticos y por qué no quiere equiparar las condiciones de los trabajadores de la escuela pública con los de la escuela concertada”.
Con todo, Marga Durán critica que el Partido Socialista “está en contra de la libre elección del centro por parte de los padres desde la educación infantil hasta el bachiller y FP” y de, además, “garantizar al alumnado con necesidades específicas de apoyo educativas su escolarización en las condiciones más apropiadas, garantizando la dotación de los recursos humanos y materiales necesarios. Todas estas eram enmiendas que han rechazado del Partido Popular”.