Los isleños tienen que destinar casi 7 años de renta bruta del hogar para comprar una casa
El precio de la vivienda en las Islas Baleares ha alcanzado los máximos del año 2008 con una cifra de más del 90%, según la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas), y se tienen que destinar 6,9 años de renta bruta del hogar para comprarla. Por otro lado, todavía hay 22 provincias españolas en las que el precio es inferior al 65% de los máximos, donde el número medio de años necesarios de renta bruta del hogar es de 5,3 para poder comprar una vivienda.
En general, siguiendo la publicación de Funcas, las regiones con un comportamiento más dinámico de la población y del empleo son las que han experimentado una recuperación de precio más intensa. Por consiguiente, en todas las provincias donde dicha recuperación ha sido mayor que la media nacional, las capitales han registrado crecimientos del precio superiores a la media de su región. Un hecho que apuntaría a que las capitales de estas provincias han perdido interés para los potenciales compradores y, en cambio, otros municipios lo habrían ganado por diversos motivos como podría ser estar junto a otra región dinámica y convertirse así en ciudades dormitorio.
En el último número de “Cuadernos de Información Económica” de Funcas también se subraya la importancia del empleo y la población como determinantes del precio de la vivienda. De este modo, las provincias en las que la pérdida de población ha sido importante son también las que presentan una menor recuperación del precio de la vivienda. De todas formas, en la mayoría de las comunidades, la compra de una vivienda requiere un esfuerzo inferior al necesario en el momento álgido antes de la crisis, pues el número de años de renta bruta del hogar necesarios para la compra de vivienda era 5,3 en 2018, lo cual supone 1,2 años menos que en el máximo precrisis.
Así pues, las comunidades que se sitúan por encima de esta cifra respecto a los años de renta bruta del hogar son Madrid (7 años), Baleares (6,9), Canarias (6,1) y el País Vasco (5,8). Contrariamente, muy por debajo encontramos Castilla y León (3,6), Castilla-La Mancha (3,6), Extremadura (3,8), Aragón (3,8), La Rioja (3,9), Murcia (3,9) y Asturias (3,9). Unos datos que, según indica Fernando Gómez en la publicación de Funcas, marcan unas singularidades territoriales importantes en el ámbito de la vivienda.