El grupo marratxiner “Es Raiguer” siguiendo con su organización de actividades culturales y durante todos los sábados del mes de noviembre del pasado año 2021 organizó ya un “Taller de indumentaria tradicional” de las 09:30 horas a las 13:30 horas con el fin de rescatar la” esencia de las piezas mallorquinas”, y tuvo tal acogida por los participantes que para acabar de aprender los conocimientos y a petición de los participantes ha continuado durante todos los sábados del mes de febrero en la misma franja horaria llegando a perfeccionar la técnica “del espíritu de las piezas mallorquinas”.
Ha sido un taller en el que se ha aprendido a confeccionar la indumentaria mallorquina como se hacía antiguamente en los siglos XVIII y XIX en Mallorca, se han confeccionado piezas para uno mismo o misma, para la familia y amigos y simplemente lo único que han tenido que hacer los participantes es comprar el tejido y uno mismo o misma de la mano de una gran modista la han terminado, los participantes prácticamente han sido los mismos que ya participaron en el mes de noviembre y ha quedado una lista de espera para una próxima edición del taller, ha tenido una gran acogida entre el público asistente con un mínimo de nociones de costura y con unas clases abiertas para todos y todas totalmente altruista.
Los objetivos del taller han sido aprender los conocimientos básicos de la costura y del patronaje de la indumentaria mallorquina y los participantes han aprendido o han perfeccionado la técnica del coser y terminando la pieza que se habían propuesto hacer desde un principio, pero no de cualquier manera, una técnica bien hecha y reproducir por ejemplo: «gipons, faldas de damunt y las de davall, calçons amb bufes, camisas, marineretes, calçoneres, capetes, manegots, guatllaretos, devantals… “, en este mes de febrero todos los participantes han llegado a conseguir sus propósitos y se ha realizado igualmente todos los sábados del mes de febrero del 2022, es decir los días 5, 12, 19 y 26 en el mismo horario llegando al éxito y aprender bien todo sobre la técnica en la indumentaria mallorquina.
Hemos conseguido el máximo posible de personas interesadas en conocer la indumentaria tradicional, con una capacidad máxima para 20 personas en el taller, sintiéndolo mucho por las personas que no han podido asistir por motivos de espacio y la situación del COVID19.
Para la costura tradicional es más que una simple afición, es una técnica aprendida y también un sentimiento hacia el que has creado basado en una estimación por la cultura de la indumentaria de nuestros antepasados. Cabe destacar que en la técnica aprendida se ha sido muy meticuloso a la hora de coser, pues hay que mirarse mucho como lo haces y así obtener buenos resultados.
Cada modista tiene un sello especial. Más que un arte se diría que es un valor añadido, pues se tiene más aprecio a algo que has hecho tú con tus manos, y que te ha hecho sudar, que no a algo comprado o hecho de cualquier manera.
Cada vez son menos las modistas que realizan trajes de «pagès o pagesa» en Mallorca, quizás por ser una tarea laboriosa, o por ser una profesión en declive. Por ello, puede llamar la atención encontrar en modistas dedicadas a la confección de indumentaria tradicional, y, sobre todo, porque más allá de realizar piezas a medida, investigan, localizan y, a veces, hasta reproducen piezas antiguas originales.
Labor que detallan y que permiten descubrir la riqueza y diversidad de estilos que existía en los armarios de antaño, ya que la moda también marcaba la indumentaria de nuestros antepasados, contrariamente a esta percepción que podemos tener en la actualidad de una vestimenta con una cierta uniformidad, que las modistas coinciden en atribuir a la folklorización de la indumentaria, también para la adaptación de las piezas a su uso más habitual: en las «Mostres de Ball».
Probablemente las modistas de indumentaria tradicional no es coincidencia y que, en un momento dado, comenzaran a coser alguna pieza y reproducir detalles o modo en desuso, y han acabado por dedicar gran parte de su tiempo no sólo a confeccionar trajes de nueva factura, sino también a recomponer piezas antiguas para que puedan volver a ser lucidas después de mucho tiempo dentro de un «canterano».
Una prueba de que la indumentaria tradicional empieza a dignificarse, aunque todavía hay mucho camino por recorrer, sobre todo mientras queden «personas que lo consideren como un disfraz».
«Es Raiguer» y las personas que han participado en el taller podemos afirmar que aparte de emplear la aguja y el dedal también se han compartido muy buenos momentos, risas, alegrías, bromas y nuevas amistades.
¡Seguramente el taller más adelante se vuelva a organizar para esas personas que no han podido asistir en el mes de febrero para continuar apasionándonos con el ”espiritu de las piezas mallorquinas”!.
Diego Fernández
Presidente del grupo “Es Raiguer”