Este año, la Fira del Fang llega a la edición número 35, y lo hace como una cita adecuadamente apuntada a la agenda de los amantes del mundo de la cerámica. Entre las novedades, el cambio de fechas: será del 9 al 17 de marzo, para no coincidir con la celebración de los actos del Día de las Islas Baleares.
El alcalde, Joan Francesc Canyelles, la regidora de Comercio y Turismo, Jero Sans, y el presidente del Consell de Mallorca, Miquel Ensenyat, han presentado esta tarde de miércoles las novedades de la Fira en el estand de Mallorca a la ITB de Berlín, donde están desde el martes.
Canyelles destaca que “la Fira introduce este año el showcooking, que irá a cargo de Miquel Calent y estará integrado dentro de Fang Cuina”.
“Fang Cuina es una iniciativa -explica la regidora de Comercio y Turismo, Jero Sans- que nace para dar a conocer y promocionar la cocina de Marratxí combinada con el barro, nuestro producto más reconocible y el más autóctono”. Cuenta con 15 restaurantes locales que se han adherido y que ofrecerán platos cocinados con cerámica a precios económicos en el decurso de la Feria. Además, estos platos habrán sido hechos en las olleries de Marratxí y llevarán serigrafiada la inscripción ‘Fang Cuina’.
Otra cuestión que también cambia es la temática de la Feria; de hecho, lo hace cada año. En ocasiones, ha sido vinculada con la tradición de los ollers marratxiners; otros, en cambio, ha tocado temáticas diversas, como por ejemplo la arquitectura o la figura de Ramon Llull (2016). Esta vez, el protagonismo temático será para el té y su relación con la cerámica. Contará con talleres y conferencias, con especial protagonismo para uno de los principales especialistas en esta materia, Eduardo Geijo.
Para el regidor de Ferias y Fiestas, Josep Ramis, “la Fira del Fang es el elemento cultural e identitario más importante de Marratxí. Y, evidentemente, del mismo modo que ya acumula unos años de trayectoria, también tiene muchos de años de recorrido por delante”.
“La Fira -continúa explicando- tiene un prestigio reconocido dentro del calendario de ferias europeas. Probablemente, las de más renombre sean las de Aubagne (en Francia) y Faenza (Italia). Según los ollers locales, los años de oro fueron los 80 y 90, sobre todo por la novedad que llamaba mucho la atención. En todo caso, y esto es una opinión personal, creo que los últimos cuatro o cinco años la cerámica artesanal está viviendo otro buen momento, puesto que hay una tendencia clara de usar la cerámica no solo como elemento decorativo sino también como elemento funcional”.
En cuanto al número de expositores, el máximo que permite el espacio de Sant Marçal es de 40, de los cuales una docena se reservan siempre para las olleries de Marratxí.