Las obras del proyecto de conversión en vía urbana de la autopista de Levante (Mi-19) a la entrada de Palma, concretamente, desde la calle de Manuel Azaña hasta el torrente de na Bàrbara, han empezado este lunes, con tareas de señalización y preparación de los materiales. La noche del miércoles al jueves se realizarán las tareas de repintado de los carriles en sentido a Palma, para poder iniciar las tareas de trabajo en la mediana de la calzada y, por lo tanto, habrá un paso alternativo en momentos puntuales de la noche.
Durante el mes de junio y julio, en dirección al aeropuerto de Son Sant Joan, se dejará sin circulación uno de los tres carriles de salida de Ciutat para poder trabajar en la mediana, donde se tienen que quitar las vallas New Jersey; el otro lado, en dirección a Palma, no se verá afectado ninguno de los tres carriles.
La cuenta @carreteres y el visor d’incidències del Consell de Mallorca son las dos vías de información, mediante las cuales la ciudadanía se podrá mantener informada de las posibles afectaciones de esta vía.
La obra
El objetivo de esta intervención es recuperar la conexión del polígono de Levante con el frente marítimo y «humanizar» una vía que tiene una intensidad media diaria (IMD) de 70.000 vehículos. El precio de la adjudicación es de 1,2 millones y el plazo de ejecución es de seis meses.
Esto se hará ampliando la acera del Palau de Congresos, reduciendo la velocidad de los vehículos que entran de 90 a 80 km/h, incrementando el ajardinamiento con plantas pequeñas a lo largo de los 850 metros que forman parte del proyecto y, de este modo, transformar una sección de autopista en una sección de tipo vía urbana.
Hay que destacar que el proyecto cuenta con otras actuaciones, como las de incluir dos paradas de autobús, una mejora del drenaje de la zona y una mejora de los tubos de alumbrado y telecomunicaciones.