Más allá de que el vegetarianismo es una tendencia en continuo crecimiento a nivel mundial, empezar por los alimentos más saludables y menos calóricos, permite descubrir una nueva forma de alimentarse no exenta de sofisticación.
Los hoteles están descubriendo cómo cada vez más viajeros apuestan por algunas de las infinitas variantes del vegetarianismo y se decantan por propuestas gastronómicas capaces de sorprender al más cosmopolita de los huéspedes. Hablamos del Hummus de remolacha asada con cebollitas encurtidas y pan de Cerdeña, de Salpicones de hortalizas confitadas con cilantro fresco y guacamole, pero también del Carpaccio de tomate feo de Teruel y ceviche de hortalizas. Los anteriores platos no dejan de ser simples ‘entrantes’ o ejemplos de recetas saludables que, con el asesoramiento de Healthia Certification, empiezan a incorporar los hoteles interesados en que placer y salud vayan de la mano.
En la actualidad, se estima que el vegetarianismo crece anualmente por encima del 10% entre los jóvenes de Alemania, Austria, Italia y una larga lista de países, ya no solo porque existe un amplio consenso científico sobre los beneficios de los alimentos de origen vegetal (la propia Organización Mundial de la Salud indica que, como mínimo, cualquier persona debería ingerir 400g diarios de hortalizas, verduras y frutas), sino también porque la comida vegetariana se ha librado del estigma de ser aburrida. La mejor prueba es el creciente número de omnívoros, amantes de la buena mesa, que caen postrados ante entrantes vegetarianos tan exquisitos como la Ensalada de aguacate, quinoa y habas, los Gajos de calabaza asada a las finas hierbas, el Tofu al limón con arroz rojo, el Ajoblanco con shiitake o la Ensalada fresca de pepino, aguacate y manzana, macerada con especias y cebollino.
Más allá de consideraciones organolépticas, los entrantes vegetarianos contribuyen a llevar una alimentación equilibrada y resultan especialmente recomendables para personas con sobrepeso u obesidad (ya que aportan volumen al estómago, a cambio de pocas calorías), deportistas, diabéticos, viajeros con hipercolesterolemia y, en general, cualquier persona interesada en velar por su salud. Con una ventaja adicional: pese a tentar al paladar, la mayoría permiten seguir cuidando la línea y logran que dejemos de lado platos menos recomendables desde el punto de vista de la ortodoxia nutricional y la evidencia científica.
Con el propósito de ayudar a los hoteles interesados en ofrecer una alimentación saludable, Healthia Certification supervisa los requisitos que han de cumplir aquellos establecimientos que, sin dejar de mantener su identidad gastronómica, desean incorporan opciones saludables en todos sus puntos de restauración. Así, en el supuesto de que el hotel incluya aperitivos, tentempiés o tapas para compartir (chips, aceitunas, encurtidos, conservas, croquetas, embutidos, marisco, etc.), debe incorporar, como mínimo, dos de las opciones que se detallan a continuación para que Healthia Certification acredite que el establecimiento ofrece un plus de excelencia:
*Tentempiés de hortalizas frescas elaborados con ingredientes 100% vegetales.
* Hortalizas cocinadas, preparadas exclusivamente con ingredientes 100% vegetales, que empleen técnicas culinarias bajas en grasas (como, por ejemplo, la cocción a la plancha, al vapor o al horno, en lugar de las tradicionales frituras).
* Piscolabis a base de legumbres, cereales o tubérculos preparados exclusivamente con ingredientes 100% vegetales y cocinados con técnicas culinarias bajas en grasas, tal y como sucede, por ejemplo, con el hummus.
Buena prueba del éxito que comienzan a cosechar los entrantes vegetarianos es el auge que experimenta el término ‘grazing’ (tentempié) en diferentes países anglosajones y, muy especialmente, en Estados Unidos, donde cada vez resulta más habitual que la comida principal del mediodía sea poco más que un picoteo saludable (en aras a no interrumpir el trabajo), que tiene su prolongación durante prácticamente el resto de la jornada, hasta llegar a la tarde-noche, cuando los anglosajones acostumbran a realizar la comida central del día, a semejanza de lo que sucede también en el norte de Europa y en buena parte del mundo. Tal vez esto explique el creciente protagonismo que están alcanzando los entrantes vegetarianos en las cartas de muchos hoteles y la previsión de que a corto plazo su relevancia sea considerablemente mayor.
Según la revista Quality Assurance and Food Safety, la comida saludable se ha convertido en la principal tendencia emergente dentro de la restauración. Prueba de ello es que los aperitivos más calóricos están perdiendo protagonismo frente a los entrantes elaborados con productos frescos que brotan de la tierra.
Además de suministrar muchos nutrientes y pocas calorías, los alimentos de origen vegetal ayudan a prevenir enfermedades, en vez de aumentar el riesgo de padecer diversas patologías (diabetes, sobrepeso, etc.), como ocurre con los snacks salados, los embutidos y otros tentempiés de origen animal.
Partiendo de esta premisa, el equipo de Healthia Certification, con el respaldo de la Fundación Española de Dietistas-Nutricionistas, aporta su dilatada experiencia en este campo para canalizar esta preocupación ciudadana de cara a que los hoteles ofrezcan también alternativas saludables que complementen su oferta.
Sobre Healthia Certification
Healthia Certification es el único sello de alimentación saludable destinado al sector hotelero. Es de alcance internacional e identifica y acredita aquellos hoteles que ofrecen a sus clientes la oportunidad de seguir una alimentación saludable durante toda su estancia.
Alineados con las nuevas tendencias de consumo, los hoteles con certificación Healthia ofrecen opciones saludables en todos sus puntos de restauración y de servicio (bufets, restaurantes, bar, cafetería, minibar, amenities y menús de grupo, entre otros) con el objetivo de que el huésped que se quiera cuidar lo pueda hacer en cualquier momento del día. Healthia Certification satisface a todos aquellos huéspedes preocupados por la alimentación cuando se encuentran fuera de casa, así como a personas con hipercolesterolemia, obesidad o sobrepeso, diabetes, vegetarianos y deportistas.