Se cumplen cuatro décadas del estreno en Estados Unidos de ‘Falcon Crest’. La serie de intriga, pasiones y enredos en los viñedos del valle de Tuscany se mantuvo en antena durante nueve años entre 1981 y 1990. Llegó a España en enero de 1985 y fue un bombazo de audiencias. Jane Wyman encarnó a la “perversa” Angela Channing. Lorenzo Lamas fue su nieto Lance Cumson, Susan Sullivan dio vida a Maggie; Ana Alicia a Melissa, Robert Foxworth a Chase y David Selby a Richard. La serie recibió muchos invitados de lujo como Lana Turner, Kim Novak, Gina Lollobrigida e incluso a la española Assumpta Serna.
Por Dani López
Es sin duda una de las series míticas de la televisión de los ochenta. ‘Falcon Crest’ cumple este sábado 4 de diciembre 40 años. Fue ese día de 1981 cuando se lanzó en Estados Unidos; la CBS emitió el primer episodio titulado ‘En la casa del padre’. A España llegaría cuatro años después, en enero de 1985 de la mano de TVE y rápidamente se convertiría en un éxito de audiencia tan grande que incluso Hombres G le dedicó una canción. Hoy, cuatro décadas después, sigue formando parte del imaginario colectivo tanto por sus carismáticos personajes como por su sintonía, creada por Bill Conti, que es sinónimo de lucha por el poder y el lujo.
BAJO EL CONTROL DE ANGELA CHANNING
Para llegar a su debut, tuvo que superar un piloto fallido titulado ‘The vintage years’ y corregir unos cuantos errores entre los que estaba el cambio de nombre.
‘Falcon Crest’ es una creación de Earl Hamner Jr (1923-2016). El encargo le llegó debido a su éxito con la serie ‘Los Walton’ (The Waltons), que se emitió entre 1972 y 1981. La cadena quería aprovechar su talento y, de paso, alargar los grandes datos que estaban logrando con ‘Dallas’.
Precisamente, al calor de ‘Dallas’ había surgido en la competencia ‘Dinastía’ (Dynasty) a principios de 1981. La CBS deseaba una serie en la misma línea, con escándalos familiares, intrigas y luchas de poder. Su objetivo era colocarla en la noche de los viernes tras las andanzas de los Ewing.
‘Falcon Crest’ fue todo un acierto. La serie emitió 227 episodios y se mantuvo durante nueve temporadas en antena gracias a la fidelidad del público. En Estados Unidos nunca llegaría al numero uno, pero en países de Europa como España o Alemania causaría auténtico furor.
Siguiendo el esquema de las denominadas soap opera para primetime, se eligió como escenario unos viñedos. Serían el objeto de deseo, que motivaría las triquiñuelas más elaboradas y los enfrentamientos más cruentos.
La historia comenzaba con un accidente en el que moría Jason Gioberti (Harry Townes) al caer en las bodegas tras sorprender a su sobrina Emma Channing (Margaret Ladd) con un tipo de dudosa reputación llamado Turner Bates (Robert F. Lyons).
La madre de Emma, Angela Channing (Jane Wyman) decidió modificar el escenario y las circunstancias de la muerte de su hermano Jason. Así, su fiel Chao-Li (Chao-Li Chi) lo metió en su furgoneta y lo lanzó al vacío provocando una gran explosión. De este modo, la versión oficial de la muerte sería un accidente de tráfico: Jason se salió de la carretera porque conducía borracho.
La artimaña de Angela estaba motivada por un codicilo del testamento que estipulaba que para garantizar la unidad de Falcon Crest, el hermano que sobreviviera se quedaría con la gran mayoría del imperio vinícola. El hijo de Jason, Chase Gioberti (Robert Foxworth) se tuvo que conformar así con una pequeña parcela de tierra. Pero, pese a haber estado distanciado de su padre y vivir con su familia en Nueva York, decidió quedarse con la propiedad y mudarse al Valle de Tuscany para encauzar su vida abandonando su profesión de piloto para iniciarse en el mundo del vino. Convenció a su esposa Maggie (Susan Sullivan) y arrastró a sus hijos Cole (William R. Moses) y Vickie (Jamie Rose) en un cambio radical de la gran ciudad que nunca duerme a un bucólico espacio entre viñedos.
A partir de aquí se desencadenaron las intrigas, amores y misterios y que conducen, en 18 episodios, al final de la primera temporada en la que descubierta toda la verdad sobre la muerte de Jason, Chase acuerda con Angela el reparto al 50 por ciento de Falcon Crest.
GRANDES INVITADOS Y FINALES DE TEMPORADA DE INFARTO
‘Falcon Crest’ conquistó a los espectadores de medio mundo gracias a sus personajes, sus diálogos chispeantes, sus elaboradas intrigas, un reparto muy bien elegido, invitados de lujo y finales de temporada de infarto.
Jane Wyman, ganadora del Oscar por ‘Belinda’, se hizo con el papel de Angela Channing. Se cuenta que fue una recomendación de su amiga Barbara Stanwyck, que declinó convertirse en la matriarca del clan. Se mantuvo en la serie durante las nueve temporadas en las que estuvo en antena, aunque faltó gran parte de la última.
Encabezaba el reparto junto a Lorenzo Lamas (Lance Cumson), Susan Sullivan (Maggie Gioberti), Robert Foxworth (Chase Gioberti), Ana Alicia (Melissa Agretti), David Selby (Richard Channing), Abby Dalton (Julia Cumson), Margaret Ladd (Emma Channing), William R. Moses (Cole Gioberti), Jamiie Rose (Vickie Gioberti), Dana Sparks (Vickie Gioberti), Sarah Douglas (Pamela Lynch), Mel Ferrer (Phillip Erikson), Laura Johnson (Terry Hartford), Cesar Romero (Peter Stavros), John Callahan (Eric Stavros), Brett Cullen (Dan Fixx), Simon MacCorkindale (Greg Reardon), Paul Freeman (Gustav Riebmann) y Chao Li Chi (Chao-Li).
Uno de los ganchos de la serie fue contar con la participación de grandes estrellas del cine. La primera en pisar los viñedos fue Lana Turner, que encarnó a Jacqueline Perrault, la madre de Chase. Tras ella llegarían otras figuras como Gina Lollobrigida, en la piel de Francesca Gioberti, la hermana secreta de Angela; Leslie Caron como Nicole Sauget; Kim Novak como Kitt Marlow; Cliff Roberton (Michael Ramson), Ursula Andress (Madame Malec), Anne Archer (Cassandra Wilder), Celeste Holm (Anna Rossini), Lauren Hutton (Liz McDowell), Eddie Albert (Carton Travis) y otras muchas figuras muy conocidas de la pequeña pantalla como Morgan Fairchild, que dio vida a una atormentada abogada que sufrió abusos sexuales siendo una niña; Robert Stack, que fue el mafioso Ronald Saunders; John Saxon, que encarnó al padre de Lance, Tony Cumson e incluso la malvada Diana de ‘V’, Jane Badler, que fue una niñera con planes secretos.
La actriz catalana Assumpta Serna pisó los viñedos en la octava temporada dando vida a Anna Cellini.
Si algo esperaban con ansia los fieles seguidores de ‘Falcon Crest’ eran los impactantes finales de temporada. La revista Teleindiscreta, entre otras, se encargaba de dar todos los ‘spoilers’ para que nadie se quedase con las ganas de saber qué iba a pasar tras sucesos como terremotos, bombas, disparos o accidentes de aviones.
La primera temporada acaba con el pacto entre Angela y Chase para compartir el control de ‘Falcon Crest’. A partir de ese momento todo iría a más. La segunda dejó a los seguidores con el alma en un puño cuando Julia comenzó a disparar a diestro y siniestro en el salón de la casa al ser descubierta como la asesina de Carlo Agretti (Carlos Romero). La imagen de un ataúd cerraba la tanda de episodios dejando el interrogante en la audiencia.
La tercera temporada acabaría de manera igualmente impactante. El avión en el que viajaban casi todos los protagonistas se precipitaba al vacío al incendiarse los dos motores.
Cassandra Wylder se hacía con dos tercios de Falcon Crest en el final de la cuarta tanda mientras Maggie descubría a su esposo besándose con otra mujer y corría a refugiarse en los brazos de Richard antes de que estallase una bomba.
Un terremoto cerraba la quinta temporada y la revelación de que Richard era realmente el hijo de Angela cerraba la sexta al tiempo que Melissa caía con su coche al mar y Chase se lanzaba para recuperar al bebé que se había llevado la chica.
El final de la séptima llegaba con la muerte de Richard, Angela perdiendo Falcon Crest a manos de Melissa y prometiendo volver antes de sembrar la duda de si era Chase o Richard quien debía decir a Maggie que estaba vivo.
La octava temporada comenzó el declive. Finalizó con Richard en la cárcel. Y la novena puso la guinda con un discurso de Angela en el que brindaba por el futuro y por su imperio: “la gente va y viene, pero la tierra perdura”.