Este domingo, a partir de las 21.25 horas, Jordi Évole hablará con el del doble campeón olímpico Gervasio Deferr, que, tras conseguir dos oros y una plata olímpicos en tres juegos consecutivos, cayó en el pozo de las adicciones y la depresión. Será en la segunda entrega de la nueva temporada de ‘Lo de Évole’, que en su estreno logró un 9,8 por ciento de audiencia.
‘Lo de Évole’ vuelve este domingo a laSexta este domingo, a las 21.25 horas, con Gervasio Deferr. Jordi Évole hablará con doble campeón olímpico para conocer en profundidad su trayectoria vital, que le llevó de la gloria deportiva a la dura caída en el mundo de las adicciones y la depresión.
Después del gran salto llegó la gran caída. Esta frase puede resumir la historia del gimnasta Gervasio Deferr, que después de llegar a la élite y conseguir dos oros y una plata olímpicos en tres juegos consecutivos, cayó en el abismo de adicciones, sobre todo al alcohol y la depresión.
Deferr habla con Jordi Évole de la difícil combinación de una vida diseñada para ganar competiciones deportivas con una vida personal en la que casi lo pierde todo. Évole repasa con él el tortuoso camino que todo deportista olímpico debe atravesar para conseguir brillar unos segundos cada cuatro años.
DE LA GLORIA OLÍMPICA AL ABISMO… Y LA RESURRECCIÓN
‘Gervi’ revive con Jordi Évole los saltos en el potro de los juegos de Sídney 2000 y Atenas 2004, en los que logró el oro, y el ejercicio de suelo en Pekín 2008, que le valió una medalla de plata. “Os van a doler las manos de tanto aplaudirme”, pensó, antes de saltar. Pero ya en plena competición, aparecían también los demonios.
La autoexigencia de Deferr era tan grande que, en Atenas, a pesar de haber conseguido una medalla de oro y revalidar su título olímpico, se fue pensando que había fracasado porque falló en el ejercicio de suelo. “Yo sabía que era bueno y no poder demostrarlo me mataba”. Y bebía. De hecho, afirma en ‘Lo de Évole’ haber competido en aquella final de 2004 después de una noche de borrachera. Y ya antes de esos juegos, asegura haber pedido no pasar controles antidoping por miedo a dar positivo por cocaína.
El positivo por cannabis en 2002 y el rechazo hacía él de todo su entorno que vino después y, sobre todo, el vacío que vio ante él al retirarse en 2011, forman parte también de esa otra cara, la más oscura, de la historia de Deferr. Tras la retirada “no tenía objetivos”. Cayó en una espiral autodestructiva de drogas y, sobre todo, alcohol, que le llevaron al extremo: “No encontraba la razón de nada. La única manera de parar mi cabeza era bebiendo”.
Hasta que en 2017 entró en un centro de desintoxicación, logró salir del pozo y se puso a entrenar a chicos y chicas en un gimnasio en el popular barrio de La Mina, en Sant Adriá de Besós, en Barcelona. “Me dan la vida”, asegura en el programa de laSexta.
GRAN ESTRENO
El regreso de la nueva temporada de ‘Lo de Évole’, el pasado domingo, se convirtió en lo más visto de laSexta durante el fin de semana con cerca de 1,6 millones de seguidores (1.586.000) y un gran 9,8% de cuota. Con este resultado, se situó muy por delante de su competidor (+3,8 puntos), liderando además de forma absoluta en Target Comercial (12,1%) y entre todos los públicos de menos de 55 años, así como en País Vasco (12,7%) y Madrid (13,8%).
El programa conducido por Jordi Évole, que contó con Morad como primer entrevistado tras la votación del público, congregó a 4.278.000 espectadores únicos durante su emisión.