Tres mujeres han tenido que ser atendidas por una intoxicación leve de humo
La madrugada de este pasado lunes, alrededor de las 2:45h., un o unos desaprensivos (por no llamarlos de otra manera) no se les ha ocurrido otra cosa que prender fuego a una pila de muebles que se encontraban preparados para ser recogidos por la brigada de Medio Ambiente del servicio de recogida domiciliaria de trastos del Ayuntamiento.
El suceso ha tenido lugar en la calle Cabana del Pont d’Inca, a la altura del número 51. A raíz del fuego provocado han tenido que ser atendidas 3 mujeres de 36, 57 y 81 años, por una intoxicación leve de humo. Hay que destacar, que este acto vandálico podría haber ocasionado un incendio en las viviendas superiores, donde, por ser la hora que era, presumiblemente se encontraban durmiendo numerosas personas. Gracias a la rápida intervención de los bomberos no ha habido que lamentar más daños en el inmueble de los que se aprecian en la fotografía.
Este incomprensible atentado a la seguridad ciudadana, hay que sumarlo al sucedido la madrugada del 5 de noviembre en Sa Cabaneta, en el que también alguien prendió fuego a un contenedor situado en la calle Martí Rubí que quedó completamente destrozado (ver foto abajo).
Esperemos que estos dos sucesos tan próximos en el tiempo, no tengan continuidad, y se trate de una casualidad de gamberros sin conexión entre ellos. Solo faltaría que nos encontráramos con un grupo organizado, como sucede en Palma, donde se han quemado infinidad de contenedores y varios coches aparcados junto a ellos, habiendo causado, hasta el momento, daños por valor de miles de euros.