¿Cuál sería el coste para todos los residentes en Baleares si los niveles de emigración de personas jóvenes en la próxima década no variasen?, ¿Qué supone la baja tasa de fecundidad?. Son algunas de las preguntas a la que el Consejo de la Juventud de España (organismo autónomo dependiente del ministerio de Asuntos Sociales) ha querido enfrentarse y a la que intenta dar respuesta el informe `Juventud Necesaria´ que ha presentado hace poco.
En la actualidad, la juventud balear registra una de las tasas de emancipación más bajas de Europa, aunque algo mejor que la de la media española, sólo 3 de cada 10 están emancipados de casa de sus padres y madres, y el desempleo afecta al 44,4% de las personas de este colectivo.
Pero uno de los datos más alarmantes es el relativo al coste de la emigración juvenil en las islas. Según estimaciones basadas en datos del Instituto de la Juventud de España (INJUVE), entre 2009 y 2013 más de 5.040 personas jóvenes emigraron de Islas Baleares.
El informe cifra en más de 1.887 millones de euros las pérdidas que, en los próximos 10 años, supondrá que continúe el mismo ritmo de emigración por parte de miles de jóvenes. Dicha cantidad resulta de sumar el gasto que ha invertido el gobierno de Islas Baleares en la educación de las personas migrantes así como la falta de recaudación impositiva al no trabajar en el territorio. Esta cantidad estimada supera el doble del presupuesto en 2015 para educación en la comunidad.
Los autores se plantean cual sería la situación si el sistema de pensiones fuera de competencia autonómica. La conclusión es que la carga económica de las pensiones sobre los salarios baleares llegaría a ser insostenible en el futuro y adoptando medidas que mejoren la situación de la juventud ayudaría a reducir esta carga. Esa es una de las principales conclusiones del citado informe. Si la situación de la juventud, con altos índices de desempleo, emigración y de emancipación, continúa igual, la fecundidad caerá considerablemente. Se agrava así la situación de envejecimiento de la población muy acusada en la actualidad.
En el año 2014 el porcentaje de jóvenes entre 15 y 29 años ha descendido en 6,5 puntos respecto al año 1998, llegando a valores del 16,8% del total de la población balear en 2014. Por otra parte, los datos ponen de manifiesto cómo el caso balear es significativamente menos grave en comparación con la pauta del conjunto del Estado español, ya que se combinan un porcentaje de jóvenes superior con un menor índice de envejecimiento. En este escenario, ha sido posible observar cómo la mayoría de los municipios baleares se encuentran entre los que tiene un mayor porcentaje de jóvenes en el Estado español.
Se ha estimado el impacto de la tasa de fecundidad y del desempleo juvenil sobre la carga económica de las pensiones en Islas Baleares sobre los salarios medios de la misma Comunidad Autónoma. Así, según ‘Juventud Necesaria’, utilizando las proyecciones poblacionales elaboradas por el INE, se ha estimado en qué medida aliviaría la carga económica de las pensiones una disminución del desempleo juvenil y el aumento de inversión en otras políticas familiares y de vivienda. Los resultados en torno a ese escenario más favorable indican una reducción de la carga económica de las pensiones sobre los salarios de los trabajadores baleares de hasta 2,4 puntos porcentuales de aquí al año 2029.
Igualmente, aplicando las medidas mencionadas se ha estimado que se podría evitar que más de 3.500 jóvenes baleares emigren en los próximos 10 años. Esto supondría que varios miles de millones de euros invertidos en Baleares se quedarían aquí y redundarían en el beneficio de toda la sociedad.
Para transmitir este mensaje y concienciar a la sociedad el CJE se ha lanzado a la carretera. Desde primeros de septiembre está recorriendo más de 4.000 kms, en una Gira de sensibilización de los habitantes y políticos de cada una de las Comunidades Autónomas. “Queremos que dejen de dar la espalda a sus jóvenes y así descubran que sin juventud no hay presente y por tanto no habrá futuro”, apostilla Enrique Hernández, vicepresidente del CJE.
