La presidenta del Consell, Catalina Cladera, y la conseller de Asuntos Sociales y Deportes Fina Santiago han visitado hoy los primeros residentes de Son Caulelles, residencia gestionada por el IMAS y construida siguiendo el modelo de atención centrada en la persona, cofinanciada por ambas instituciones y que amplía con 100 más las plazas residenciales para personas mayores de Mallorca
La presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera, junto con la consejera de Asuntos Sociales y Deportes del GOIB, Fina Santiago, la conseller de Derechos Sociales y presidenta del Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS), Sofia Alonso, la directora insular de Atención Sociosanitaria, Elsa Herranz, han visitado hoy la nueva residencia Son Caulelles, de Pòrtol, justo quince días después de que este centro abriera sus puertas a los primeros residentes.
Concretamente, el IMAS puso en marcha la nueva residencia el pasado día 3 de octubre y, desde entonces, ya han ingresado 17 personas de la lista de dependencia, algunas de las cuales provienen de su domicilio, mientras que otras s han trasladado allí desde otros centros residenciales de la isla para estar más cerca de sus familiares.
«Trabajamos para poner al alcance de las personas vulnerables de Mallorca recursos de proximidad, cerca de su entorno personal y comunitario, y diseñados para ofrecer unos cuidados personalizados, adaptados a cada usuario siguiendo los criterios del modelo de atención centrada en la persona. Las personas están en el centro de nuestra atención y, con la puesta en marcha de Son Caulelles, cumplimos con el compromiso de reforzar los servicios públicos para ofrecer a todo el mundo lo que necesita», ha destacado la presidenta del Consell.
Son Caulelles es el último equipamiento público puesto en marcha para atender a personas mayores en situación de dependencia en Mallorca. El proyecto ha tenido un coste de 8,5 millones de euros los cuales se han cofinanciado por el IMAS (con una aportación de 4 millones de euros) y por la Consejería de Asuntos Sociales y Deportes (que ha aportado 4 ,5 millones de euros) a través del Consorcio de Recursos Sociosanitarios y Asistenciales de las Islas Baleares. La residencia está ubicada en un solar de 5.400 m2 cedido por el Ayuntamiento de Marratxí.
«Éste es un ejemplo de colaboración y corresponsabilidad entre administraciones para mejorar la vida de las personas. Para el Consejo, las políticas sociales son una prioridad; a través del IMAS, hemos invertido este año más de 240 millones de euros con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y ciudadanas de la isla», ha concluido Cladera.
Por su parte, la consejera Fina Santiago ha defendido el modelo de construcción y gestión pública impulsado. «Desde hace más de 20 años, después de la residencia de Felanitx, la de Son Caulelles es la primera residencia pública construida y gestionada con dinero público. No ha habido ninguna otra desde entonces. Ha habido otros modelos de ceder terrenos públicos y construir y gestionar a la privada a través de la concertación o construcción pública y posterior externalización. Esto aplicado en educación nos sorprendería y en nuestra comunidad autónoma ha ocurrido. Este Gobierno, sin embargo, ha apostado por los servicios públicos: ésta es la primera que ya funciona y tenemos 9 más, porque nuestro modelo es gestión pública para ofrecer una mayor calidad. Desde el Govern continuaremos ligados a esta residencia a través de la concertación de 70 plazas con el IMAS destinadas a la atención de las personas mayores en situación de dependencia», ha afirmado Santiago.
El alcalde de Marratxí, Miquel Cabot, se ha mostrado muy satisfecho de que la residencia de Pòrtol entre en funcionamiento y empiece a atender a personas usuarias. «Estamos de enhorabuena a todos los marratxiners de tener una residencia pública en nuestro municipio y de ver cómo entran los primeros usuarios. Debemos poner en valor el trabajo de las tres instituciones»
La residencia Son Caulelles cuenta con 100 plazas y fue construida siguiendo el modelo de atención centrada en la persona. El centro está estructurado en cinco módulos de convivencia de 20 plazas cada uno, que funcionan a modo de hogar con espacios similares a los de un domicilio, lo que posibilita que los residentes disfruten de un ambiente más familiar con el resto de usuarios de su grupo y los profesionales que les atienden.
Las primeras 17 personas que ya viven en el centro han ingresado en el mismo módulo y progresivamente se irán llenando el resto de módulos hasta llegar a cubrir la totalidad de las plazas. El 30% de las plazas de la residencia están concertadas con la conselleria de Salud, que invertirá 1,2 millones de euros anuales para atención sociosanitaria a mayores de 65 o de 55 con discapacidad reconocida que requieren cuidados complejos o rehabilitación y estén en la espera de plaza residencial definitiva o de recibir otros recursos o soportes que les permitan volver a su casa. La conselleria de Asuntos Sociales, por su parte, destina 1,8 millones de euros anuales para financiar al otro 70% de las plazas que irán destinadas a personas con un grado de dependencia reconocido.
El IMAS gestiona Son Caulelles directamente con recursos y personal propio, lo que ha supuesto la creación de 114 nuevos puestos de trabajo públicos. El inmueble dispone de 90 habitaciones distribuidas en tres plantas: 80 son individuales y 10 dobles. En el sótano se encuentran la cocina, lavandería y el vestuario de personal. La planta baja dispone de una zona de administración, dos módulos para personas residentes, un área común, sala de fisioterapia y terapias, y comedor, mientras que en la primera planta existen tres módulos para residentes y comedores.
Con esta nueva residencia, Mallorca ya cuenta con seis equipamientos residenciales públicos para personas mayores, operativos y gestionados por el IMAS, y que prestan atención y cuidados a cerca de 900 personas: el Hogar de Ancianos, Oms-Sant Miquel y el residencia La Bonanova en Palma, Bartomeu Quetglas, en Felanitx y Huialfàs, en sa Pobla. En esta red se incorporará la residencia Miquel Mir de Inca cuando hayan finalizado las obras de reforma y modernización del centro que dispondrá de otras 40 plazas residenciales y 25 de centro de día.