Las familias de Aurora Picornell y las roges del Molinar han recibido sus restos mortales ochenta y seis años después de haber sido asesinadas. Sus cuerpos fueron exhumados en 2021 dentro del Tercer Plan de Fosas del Govern y han sido identificados recientemente.
El Govern ha entregado este sábado los restos de Aurora Picornell; de su padre, Gabriel Picornell, y de sus compañeras Belarmina González Rodríguez, Catalina Flaquer Pascual, y de sus hijas, Antònia y Maria Pascual Flaquer, conocidas como las roges del Molinar, a sus familias en un acto de homenaje de toda la sociedad civil.
Los restos de las cinco mujeres fueron encontrados en 2021 en el cementerio de Son Coletes, en Manacor, y no en las fosas del cementerio de Porreres, donde la historiografía había planteado tradicionalmente que habrían sido asesinadas, y donde sí que se exhumó también en 2021 el cuerpo de Gabriel Picornell. Los seis se han identificado recientemente.
Durante el acto, que ha tenido lugar en el Conservatorio Superior de Música de las Islas Baleares, se han entregado los cuerpos a las familias Picornell y Flaquer -todavía no se ha encontrado registro de los familiares de Belarmina-, que serán enterrados respectivamente en Palma y en Capdepera, pueblo del cual eran originarias Catalina Flaquer Pascual y sus hijas.
En el homenaje, que se celebra cuando se cumplen ochenta y seis años del asesinato de estas seis víctimas de la Guerra Civil y la represión franquista, han participado la presidenta del Govern de les Illes Balears, Francina Armengol; el vicepresidente y conseller de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes; la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz; la ministra de Igualdad, Irene Montero; el secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez el alcalde de Palma, José Hila, y el alcalde de Manacor, Miquel Oliver, entre otras autoridades.
El acto ha sido conducido por la actriz Aina de Cos, que inauguraba la jornada con un monólogo dedicado a las víctimas, una adaptación de la obra ‘Només quan plou’.
Así mismo, y además de los parlamentos de las autoridades, de la asociación memorialista Memòria de Mallorca, de la investigadora Margalida Capellà, y de las familias de las víctimas, durante el acto ha habido varias interpretaciones musicales de xeremiers y de la Banda Municipal de Música de Palma.
La presidenta del Govern ha celebrado que «hoy, la verdad gana al olvido y la luz gana a la oscuridad» y ha asegurado que «es un día en el que te sientes orgullosa de nuestro pueblo, porque hemos decidido no ponernos de perfil, hacer justicia y asumir que la memoria nos hace fuertes, puesto que los pueblos que olvidan el pasado son pueblos que no pueden tener un buen presente ni un buen futuro».
Francina Armengol también ha agradecido a las entidades memorialistas su tarea y ha pedido disculpas a las familias «porque llegamos tarde» y ha afirmado que «las asesinaron pero no han conseguido que las olvidemos». En este sentido, la presidenta del Govern ha reivindicado la Ley de Fosas de las Islas Baleares, que se aprobó por unanimidad y que «ha hecho posible la reparación, abrir fosas para cerrar heridas». «No desfalleceremos hasta que no los encontremos a todos y todas», ha concluido la presidenta.
Por su parte, el vicepresidente Yllanes ha afirmado que «ya han pasado más de ochenta y seis años desde aquella Noche de Reyes de 1937. Y ochenta y seis años más tarde podemos afirmar que no lo consiguieron. Aurora y las roges del Molinar se han convertido en un símbolo más vivo que nunca de democracia, antifascismo y feminismo».
Hasta ahora, desde la aprobación en 2016 de la Ley para la recuperación de personas desaparecidas durante la Guerra Civil y el franquismo, se han exhumado un total de 241 personas y ya se han identificado 52 víctimas de la Guerra Civil y el franquismo. Un total de 35 han sido entregadas a sus familias, a las cuales ahora se suman Aurora Picornell, su padre, Belarmina González y las roges del Molinar.
En los próximos días se pondrá en marcha el IV Plan de Fosas y Memoria Democrática del Govern, que implicará, entre otras, una tercera y última intervención en el cementerio de Son Coletes, la intervención en zonas vinculadas al desembarco de Bayo, una nueva exhumación en el cementerio de Sant Francesc (Formentera) y una primera intervención en Cala San Vicenç (Pollença). Además, permitirá llevar a cabo nuevos estudios para definir la viabilidad de intervención en fosas que hasta ahora se consideran dudosas e incluirá la realización de una quincena de trabajos de investigación sobre memoria democrática y la restauración de objetos recuperados con los restos óseos, como la pluma estilográfica de Picornell, cedida al Govern por parte de la familia.
LAS VÍCTIMAS
Aurora Picornell
Palmesana del barrio del Molinar. Nacida en 1912, casada y con una hija pequeña, era modista de profesión. Responsable de la organización de mujeres del Partido Comunista en las Islas Baleares, había sido miembro también de la directiva de la Liga Laica de Mallorca. Sindicalista y feminista, fue la primera impulsora del Día de la Mujer Trabajadora en Mallorca. Aurora fue detenida en los primeros días después del golpe de estado militar, fue encerrada primero en la Prisión Provincial de Palma y después en la prisión de mujeres de la calle de Can Sales. Desapareció junto con otras compañeras la noche del 5 de enero de 1937.
Gabriel Picornell
Carpintero de profesión, fue impulsor de la Agrupación Comunista de Palma en los años veinte del siglo pasado. Padre de familia de una de las familias más represaliadas por el franquismo en España, fue asesinado en enero de 1937 en Porreres.
También fueron asesinados sus hijos Gabriel, Ignasi y Aurora; su hijo menor, Joan, que pudo huir a Francia durante la Guerra Civil, fue deportado al campo de concentración nazi de Dachau y murió al poco de haber sido liberado.
Antònia Pascual Flaquer
Antònia era la mayor de las hermanas conocidas como las roges del Molinar y trabajaba bordando en la Casa Singer, situada en la plaza de Cort. Toda su familia estaba adscrita al Partido Comunista, también su compañero Luis Montero, que también fue fusilado.
Antònia había participado en varios mítines. Uno de estos mítines, al cual fue con su madre, fue en conmemoración del Día de la Mujer Trabajadora y tuvo lugar en el barrio de Santa Catalina el 8 de marzo de 1936.
Se la conocía como una persona con «mucho impulso». Había sido encarcelada en 1934 a raíz de la Revolución de Octubre. Ya en 1936, después del golpe de estado, Antònia desapareció los primeros días, pero finalmente fue detenida y conducida a Can Sales (Palma), donde se reunió con su madre y su hermana Maria.
Fue fusilada el 5 de enero de 1937. Tenía 28 años.
Maria Pascual Flaquer
Maria también empezó desde joven a participar en las actividades sociales y culturales de su barrio y a escribir artículos en Nuestra Palabra, el periódico editado por el Partido Comunista de las Islas Baleares. Era modista y trabajaba para la tienda de confección Sant Antoni en la plaza de’n Coll de Palma.
Estaba casada con Josep Julià, dirigente de las Juventudes Comunistas, con quien tuvo una hija, Natàlia.
Fue encarcelada en 1934 con otras dos mujeres comunistas por haber protestado contra la detención de sus compañeros durante la Revolución de Octubre y la huelga general convocada en Palma.
Posteriormente participó en la Masa Coral Antifascista, creada por el Socorro Rojo Internacional con el fin de organizar actos para la recaudación de ayudas para los presos, represaliados y sus familias.
Fue fusilada el 5 de enero de 1937. Tenía 23 años.
Catalina Flaquer Pascual
Natural de Capdepera, la madre de las roges del Molinar, Catalina Flaquer, también conocida como Catalina Torreta, estaba separada, tenía tres hijas y un hijo y trabajaba fabricando ‘senalles’ en su casa del Molinar.
Era una activista política del Partido Comunista. Fue encarcelada y torturada por no querer revelar donde estaban sus hijas, Antònia y Maria, también militantes del Partido Comunista, que finalmente fueron descubiertas y encerradas en la prisión de Can Sales.
Fue fusilada junto a dos de sus hijas el 5 de enero de 1937. Tenía 57 años.
Belarmina González Rodríguez
También vinculada al Partido Comunista, Belarmina González ingresó el 31 de diciembre de 1936 en la prisión de mujeres de Can Sales. Fue asesinada por falangistas la noche de Reyes de 1937 junto con Aurora Picornell y las roges del Molinar. Tenía 22 años.
No existen imágenes suyas ni tampoco registro de sus familiares, pero sí que hay documentación que refleja que estaba casada y que era natural de Palencia.
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) de Palencia está colaborando con el GOIB en la busca de información sobre ella. También está colaborando con la Dirección General de Memoria Democrática del Govern el historiador David Ginard, que trabaja en la búsqueda de familiares y amigos de Belarmina en el barrio palmesano de la Soledat.