‘Los Gipsy Kings’ vuelven a Cuatro con un spin-off, ‘Mi Gran Boda Gipsy’ en el que los seguidores podrán asistir al ‘Sí, quiero’ del año con la Rebe.
Suenan campanas de boda en la familia Jiménez. Como todo buen cuento de princesas, romances imposibles y enredos familiares, la historia de La Rebe tendrá un desenlace feliz, con el triunfo del amor y un ‘Sí, quiero’ histórico pronunciado en el enlace del año. Un dichoso acontecimiento en torno al cual gira ‘Mi Gran Boda Gipsy’, spin-off de ‘Los Gipsy Kings’ que pondrá el colofón a este mítico programa de televisión en tres entregas que Cuatro estrena el lunes 13 de junio (22.45h) con una cabecera de imagen real -algo totalmente novedoso en el programa- y sintonía propia.
Estrenado en 2015 y emitido hasta la fecha a lo largo de seis temporadas -más una última con ‘Los capítulos más especiales’-, ‘Los Gipsy Kings’ revolucionaron en Cuatro el concepto de docureality, presentando con una original fórmula narrativa el día a día de diversas familias gitanas y sus carismáticos miembros, que se han convertido con el tiempo en conocidos y recordados personajes televisivos: los Salazar, los Fernández Navarro, los Maya, los Montoya, los Contreras, los García Losada y los Jiménez, protagonistas de este spin-off, ya forman parte de la historia de la televisión en nuestro país.
EL MAYOR CONTRATIEMPO: EL TIEMPO
Madrid y Plasencia son los escenarios en los que transcurren las peripecias de los Jiménez en su última y definitiva aventura televisiva: Rebeca dice que se casa y no precisamente con mucho margen de maniobra. Lo hará con Jose, el padre de su hijo, con el que finalmente se reconcilió, y en solo tres semanas. A lo ya de por sí complicado de preparar un evento de esta dimensión, se une la dificultad de hacerlo en tiempo récord. Pero que no cunda el pánico: como caídas del cielo aparecen ‘La Amiras’, unas singulares y coloridas vending planes, o webding flanes, o como se diga, que les ayudarán a preparar una boda inolvidable.
Sin embargo, las dificultades no estarán asociadas solamente a la escasez de tiempo. Uno de los momentos cúlmenes llegará con el reencuentro del novio y Dani, su futuro suegro, al que no ve desde que Rebeca y él se separaron. Para colmo, Dani no se tomó nada bien que Jose ‘secuestrara’ a su Rebeca y se fuera con ella a vivir a Tenerife, por lo que la tensión del momento amenaza con empañar el feliz enlace.
Además, Susi, la mediana de las hermanas Jiménez, que despidió los últimos capítulos con el tímido anuncio de que le gustaba un mozalbete, saldrá con la novedad de que su relación va muy en serio y quiere presentar al joven a la familia. ¿Perdón? ¿No había un momento mejor? El asunto supondrá un nuevo disgusto y motivo de estrés para Dani, que sigue empeñado en controlar al máximo la vida de sus hijas.
Quien ha participado o ha visto de cerca la organización de una boda, sabe sin duda lo que es el estrés. Cientos de preparativos, miles de imprevistos, tensiones, prisas, contratiempos, discusiones, cansancio, incomprensión… Todos estos ingredientes, aunque con mucho humor también, estarán presentes en el montaje de la boda de Rebeca, que incluirá un sonado bonus track: el embarazo inesperado de una miembro de la familia. Repetimos: el embarazo inesperado de una miembro de la familia.
Eso sí, sin hacer spoilers, el fin de fiesta será espectacular. ¿Qué espectador no sueña con ver a La Rebe vestida de blanco dando el ‘sí, quiero’? Ni las limitaciones impuestas por la situación sanitaria, que Los Jiménez cumplirán a rajatabla, impedirán una boda al más puro estilo Gipsy Kings, llena de brilli-brilli, sorpresas, música, bailes, diversión, lágrimas y emociones.