Malestar ante la decisión del Ayuntamiento de mantener cerradas las escoletes municipales

El Ayuntamiento justifica el cierre de las escoletes a que «debe prevalecer la seguridad en función de la fase y las recomendaciones sanitarias» y a que el programa de contratación de canguros «es lo que menos contribuye a la propagación del virus»

Familias afectadas: «Es incomprensible que la solución sea una ayuda para contratar a un canguro. Los niños de 0-3 necesitan especialistas en educación y la socialización con sus iguales»

«Lo que tiene que hacer el Ayuntamiento es adaptar con las medidas sanitarias necesarias las escoletes públicas y reincorporar al personal docente cualificado»

A raíz de que el Ajuntament de Marratxí haya tomado la decisión (en contra de lo previsto), de no reabrir las escoletes municipales, un grupo de 25 familias que ya habían inscrito a sus hijos, han remitido una carta a este diario mostrando su desacuerdo ante esta «incomprensible» decisión, (hay que recordar que estaba prevista la apertura de las escoletes en cuanto se entrara en la fase 3 de la desescalada).

Antes de que lean la carta que reproducimos en su integridad más abajo, decirles que nos hemos puesto en contacto con el Ayuntamiento para que nos explicaran los motivos de este cambio de criterio, a lo que nos han respondido: “siempre hemos intentado hacer prevalecer la seguridad en función de la fase y las recomendaciones sanitarias”.

En relación a la contratación de canguros, con la que tampoco están de acuerdo los padres, desde el consistorio afirrman que «el programa de contratación de canguros con las ayudas que otorga el Govern creemos que es la medida que menos contribuye a la propagación del virus y que más protege a los niños y cuidadores, además abre el abanico a ayudar a más perfiles de familias, así como a dar trabajo a maestros, profesores o cuidadores que con el estado de alarma han tenido que dejar su actividad». «Igualmente comprendemos la siruación de los padres que ya tenían inscritos a sus hijos, por lo que, en la medida de lo posible, mantendremos líneas abiertas de diálogo».

Esta es la carta enviada a Diario de Marratxí y que suscriben 25 familias afectadas por el cierre las escoletes municipales:

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«Después de que hace dos semanas el Ajuntament de Marratxí anunciara en un reportaje de IB3, que estaban desinfectando las escoletes municipales y preparándose para abrir en la fase 3, unos días después han enviado una carta a las familias con la decisión de no abrir dichas escoletes alegando que no pueden dar respuesta a 1.200 niños. Hoy sabemos que entre las dos escoletes solo habían solicitado el servicio, aproximadamente, unos 25 niños y niñas. Según la propia web del Ayuntamiento, para septiembre se están ofreciendo 147 plazas.

Mientras en Palma, Calvià y otros muchos municipios de la isla las escoletes municipales abrirán, en Marratxí se ha decidido que no se abren, diciéndonos que si queremos podemos acudir a una escoleta privada o contratar a un canguro con las ayudas que ofrecerán y que nos darán instrucciones de asesoramiento próximamente.

Es incomprensible que un gobierno de izquierdas apueste por entidades privadas en lugar de abrir las escoletes municipales. Es incomprensible que sea el tercer municipio con más habitantes de la isla y que no dé este servicio. Es incomprensible que sí haya escuelas de verano para niñas y niños de 3 a 14 años y no de 0-3, cuando el curso en éstas finaliza en agosto, y más sabiendo que tanto las familias como los propios niños y niñas que más necesidades tienen son los de la franja 0-6.

Es incomprensible que la solución sea una ayuda para contratar a un canguro. Los niños de 0-3 necesitan especialistas en educación y la socialización con sus iguales. ¿Cómo es posible que una escoleta privada pueda dar este servicio y una escoleta municipal no?, además, ¿qué canguro querrá trabajar por 250 o 400 euros al mes por 5-6 horas de trabajo diarias?. Esto es el que cuesta una escoleta.

Es incongruente hablar de una solución global para el municipio con 90.000 euros para canguros. El coste medio en España de un canguro es de 8,2 euros la hora, haciendo cálculos rápidos sale una media de 2.500 euros por familia para todo el verano. Estos 90.000€ solo cubrirían a unas 36 familias.

El Ajuntament de Marratxí, con la captación de tributos anuales y el volumen de niños que tiene comparado con otros municipios, lo que tiene que hacer es adaptar con las medidas sanitarias necesarias las escoletes públicas y reincorporar al personal docente cualificado. Hay medios, reestructuración y planificación.

Es incongruente hablar de que las plazas de las escoletes no bastarán. Hoy sabemos que hay sitio para los niños que lo han solicitado (25) y como servicio municipal, tienen el deber de ofrecerlo.

No tiene sentido haber tomado una decisión unilateral sin consultar a las familias ni a las trabajadoras de las escoletes que están con un ERTE desde marzo.

Las 25 familias que suscribimos esta carta estamos decepcionadas con la gestión del Ayuntamiento y con la respuesta que nos han dado sin tener tiempo de decidir ni planificar otra solución, lo que queremos es que nuestros hijos e hijas estén con sus compañeros y en un entorno que ya conocen».

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