El año pasado, Mallorca recibió 40.000 visitantes procedentes de los EE.UU.. Su perfil, ligado en busca de atractivos culturales, gastronómicos y medioambientales, suponen un mercado atractivo. De hecho, se trata de visitantes de alto poder adquisitivo e interesados en los valores que quiere promocionar el Consell de Mallorca. Para incentivar este mercado hay que trabajar en mejorar la conectividad aérea . La Delegación también se reunirá con productores de cine americanos para impulsar el rodaje de películas en Mallorca.
Sin renunciar a los mercados tradicionales, el Consell de Mallorca continúa explorando nuevos países emisores. Después del éxito logrado en Dinamarca, ahora, la nueva estrategia impulsada por la institución fija el foco en los EE.UU.. Así, y después de explorar las posibilidades de los países nórdicos, una delegación liderada por la administración insular, aterrizará esta semana en Nueva York. Se trata de una acción que cuenta con la complicidad de la Federación Hotelera y la Asociación de Agencias de viaje (Aviba).
Esta misión comercial y turística quiere avanzar en las negociaciones ya comenzadas y encaminadas a cerrar reservas provenientes de este mercado. Estas negociaciones incluyen la posibilidad de un vuelo directo desde Toronto, (Canadá) a Palma y que podría convertirse en un primer puente aéreo con los países norteamericanos. Para garantizar el éxito de los objetivos fijados, el Consell ha contado con la coodinación y apoyo técnico, logístico y de asesoramiento de la oficina de Turespaña en Nueva York.
Un perfil a tener en cuenta
Dentro de la nueva estrategia fijada por el Consell de Mallorca, los Estados Unidos presentan perspectivas de crecimiento como mercado emisor que podrían suponer un revulsivo importante para la economía local. Así, el gasto en turismo de los Estados Unidos, el segundo mayor mercado mundial por emisión de viajeros, aumentó 8% en 2017 hasta los 135.000 millones de dólares (110.386 millones de euros). Unas cifras que, según el conseller de Economía, Hacienda y Turismo, Cosme Bonet, «no podemos dejar de lado». Según Bonet «Los Estados Unidos son el mercado que en 2017 más creció en gasto a nivel porcentual y el que se situó como el primer mercado en gasto diario por turista. Es el turista que queremos para Mallorca: un turista de alto poder adquisitivo y que opta por la temporada media y baja porque busca otros productos, no estrictamente el solo y playa, sino la cultura, la gastronomía o la enología.».
Además, y atendiendo a que la demanda por los llamados «viajes experimentales» crece de manera incesante, «Mallorca puede convertirse en un destino perfecto por estos viajeros norteamericanos que no solamente buscan ver los diferentes destinos turísticos sino que están interesados en la cultura, las personas y las experiencias», asegura el conselle
Turismo cinematográfico; un revulsivo económico
Esta nueva estrategia se completa con una iniciativa pionera. En concreto, a través del cine como forma de atraer y rentabilizar un rodaje cinematográfico. «Su efectividad está demostrada» asegura el presidente Miquel Ensenyat, quien destaca que son numerosos los ejemplos de películas u otros formatos audiovisuales con elevada incidencia. «Despacio se empiezan a conocer cifras significativas de la repercusión positiva en un destino después de su aparición al cine o la televisión puesto que, como indican los expertos estamos ante un producto con mayor duración de emisión y, por lo tanto, mayor impacto en el espectador».
En este caso, la experiencia demuestra que aproximadamente el 30% del presupuesto de producción de un largometraje se gasta en el rodaje. Un ejemplo, es el rodaje de la Serie «Games of Thrones». Cada capitulo tiene un coste de 10 millones de dolares. La primera ciudad española en recibir el rodaje internacional, Sevilla, desde hace dos años ha aumentado sus buscas en internet en un 145%, según un informe emitido por el portal de buscas hoteles.com. Irlanda es uno de los países más beneficiados por este fenómeno; Según International Business Times, Northern Ireland Screen, comisión del audiovisual del país, aportó 15,3 millones de dólares a la producción de las cuatro primeras temporadas de la serie. A cambio, el impacto que ha generado la serie ha reportado un beneficio de 108 millones a la zona. Otro caso, algo más modesto pero de alto impacto es «Alatriste,» de Agustín Díaz Yanes, se filmó en Cádiz, Sevilla, Ubeda, Baeza y Tarifa, entre otras localizaciones, y tuvo como resultados 9.000 pernoctaciones, tres millones de euros y más de 2.000 profesionales contratados.
«La diversificación de la economía es fundamental y el sector audiovisual puede resultar decisivo. Tenemos grandes profesionales en la isla y esta sinergia entre el turismo y otros sectores productivos puede contribuir de manera efectiva a implantar un nuevo modelo económico», destaca Cosme Bonet. Ante este panorama, la delegación mallorquina aprovechará su estancia en Nueva York para reunirse con una representación de productores cinematográficos norteamericanos. También ha previsto un encuentro con la asociación de localizadores de espacios para el rodaje de películas. Todo, con la idea de «crear sinergias , impulsar este sector y al mismo tiempo, apoyar a una industria auxiliar y complementaría que genera lugares de trabajo al margen del turismo».
Durante la estancia a Nueva York el Consell tiene programadas diferentes reuniones y acciones promocionales que contarán con un denominador común: cultura, gastronomía y sostenibilidad.