«Las Muchísimas», una producción del Teatro Principal, reúne sobre el escenario a mujeres de procedencias tan diversas como Mallorca, Cataluña y Eslovenia.
“No reivindicamos nada, nos mostramos tal como somos”, dice la directora.
La Compañía de danza Mariantònia Oliver estrenará el montaje ‘Las Muchísimas’ el próximo viernes 26 de enero en la Sala Grande del Teatro Principal. El sábado 27 habrá otra función y ambas empezarán a las 20 horas.
‘Las Muchísimas’ es una propuesta escénica en la cual las intérpretes “no se disfrazan, ni se maquillan, ni representan nada. Lo que hay es lo que es. No hay reivindicación, nos mostramos tal como somos”, explica la directora de la compañía, Maria Antònia Oliver.
Y es que Las Muchísimas “es un proyecto artístico, pero el hecho de subir a 17 mujeres sobre un escenario es ya una apuesta política” y sobre todo una forma de visualizar el propio cuerpo, sus hábitos, con alegrías y tristezas. “La felicidad es una serenidad muy básica, muy sencilla, estar aquí y ahora”, dice Oliver.
Maria Antònia Oliver, durante la presentación del espectáculo, ha estado acompañada del vicepresidente primero y conseller de Cultura, Patrimonio y Deportes, Francesc Miralles, y del director del Teatro Principal, Carlos Forteza, así como del resto del equipo artístico, entre los cuales destacan la responsable del espacio sonoro, Joana Gomila, que ha contado con la colaboración de Jaume Manresa.
La compañía de danza Mariantònia Oliver nació en 1989. El 2011 concibió ‘Las Muchas’, una pieza con bailarinas de entre 70 y 82 años que revolucionó la visión de la danza contemporánea al poner en escena cuerpos que a pesar de haber envejecido demostraban estar más vivos y ser más libres que nunca.
Retomando la senda de esta línea creativa, el Teatro Principal y la compañía acordaron la producción de ‘Las Muchísimas’, una forma de adentrarse más en un mundo donde el compromiso, el atrevimiento, la experimentación y la complicidad con todo el equipo se convierte en una señal de identidad, donde los protagonistas son los “cuerpos, cuerpos fuera del foco pero más vivos que nunca y, sobre todo, más libres”, dice Forteza.
Maria Antònia Oliver ha recordado que inicialmente quería hacer este montaje con “34 mujeres, después pasé a 24 pero me seguiremos pareciendo muchas, y finalmente me quedé con 17. Fui cauta por primera vez en mi vida, porque no se trata sólo de ensayar, sentir y compartir cuerpos, también compartimos almas». El proceso de creación pasó por un taller con mujeres de Eslovenia realizado en Lubjiliana el pasado verano, y otro hecho en Catalunya el pasado octubre, para finalmente llegar a Mallorca y trabajar con las diecisiete mujeres juntas.
Me parece muy bien felicidades