Salvador ha vuelto de la muerte esta semana en ‘La Promesa’. El actor Mario García ha perdido 12 kilos para que su personaje pueda ofrecer la imagen demacrada que requería su regreso.
Mario García ha perdido 12 kilos en mes y medio para dotar de credibilidad física el regreso de su personaje a ‘La Promesa’. Salvador Romea desapareció de las tramas cuando fue obligado a incorporarse a la Guerra del Rif en África. Dejó la popular serie de sobremesa de La1 teniendo cerrado su regreso y dio inicio a un durísimo programa para rebajar su peso.
Tal y como ha explicado en Instagram el actor, el 23 de enero pesaba 74 kilos y en mes y medio ha logrado rebajarlo a 62 kilos. De esta manera conseguido dotar a su personaje de la fragilidad que necesitaba tras vivir una experiencia traumática al borde de la muerte. Y es que Salvador ha pasado hambre, ha sufrido maltrato físico y psicológico, ha perdido un ojo y ha quedado tocado por el horror y la muerte de la contienda bélica.
Las noticias que llegaban del frente hasta el palacio sembraron el desconcierto primero y el drama después. Contactos del marqués confirmaron que había muerto en batalla, pero el joven consiguió sobrevivir y ha reaparecido en palacio justo cuando su novia María Fernández (Sara Molina) estaba a punto de dar un paso hacia delante con Lope (Enrique Fortún), el mejor amigo de Salvador.
«Para mí la interpretación no es simplemente llegar y decir un texto, es algo muchísimo más complicado que eso», ha revelado Mario García, que ya fue uno de los protagonistas del anterior serial del creador de ‘La Promesa’, ‘Dos vidas’.
«Es mi trabajo y es mi vida. Me encanta encarnar un personaje hasta las últimas consecuencias. Construirlo, deconstruirlo y volverlo a construir», ha añadido dejando claro que el esfuerzo ha valido la pena porque «quería reflejar la crueldad, la injusticia y el aspecto tan descorazonador de una guerra, sea cual sea».
