Conmoción en Marratxí ante la confirmación de que no hay supervivientes del avión DAH117 de Air Algerie operado por Swiftair, que viajaba de Burkina Faso con destino a Argel y que desapareció este jueves con 116 personas a bordo. El piloto de la aeronave era Agustín Comerón, vecino de Sa Cabaneta, donde residía junto a su familia.
Según las últimas informaciones, los restos del aparato han sido localizados en la región maliense de Gossi, cerca de la frontera con Burkina Faso, totalmente desintegrados.
Desde el Ministerio de Interior de Francia, que han anunciado que ya han hallado las cajas negras, apuntan a razones climatológicas como la hipótesis más problable del accidente, aunque son prudentes y no descartan todavía ninguna otra posibilidad.
En una nota de prensa, la compañía aérea ha expresado su «más sentido pésame y condolencias a todos los seres queridos de los pasajeros y la tripulación a bordo del vuelo siniestrado DAH5017».
La tripulación del avión DAH117 pilotada por Agustín Comarón estaba formada por otros cinco españoles, siendo la copiloto también residente en Mallorca. El pasaje confirmado lo formaban: 50 franceses, 24 burkineses, ocho libaneses, seis argelinos, cinco canadienses, cuatro alemanes, un belga, un suizo, un maliense, un camerunés, un egipcio, un rumano, un ucraniano. Asimismo viajaban otras tres personas cuya nacionalidad no ha sido definida todavía.