Unos 1.100 alumnos de educación Infantil, de primer ciclo de Primaria y de los centros de educación especial Pinyol Vermell (ASPACE) y Príncep d’Astúries (ASNIMO), han participado en la fiesta de educación vial que se ha celebrado en Sa Cabana este viernes 31 de mayo. Desde las 10.00 y hasta las 13 horas, se han sucedido las exhibiciones de los cuerpos de seguridad y de emergencias, se han realizado talleres didácticos, había castillos hinchables y animación infantil.
La Unidad Canina de la Policía Nacional ha realizado un ejercicio en el que, perro y agente, han simulado la búsqueda de explosivos y drogas en un vehículo. Durante la jornada se han habilitado cuatro parques infantiles de tráfico que han aportado las policías locales de Palma, Campos, Llucmajor y Marratxí. También se ha montado un circuito dónde los niños han podido circular en karts.
Además de la Policía de Marratxí, como organizadora de la fiesta, también han participado los Bomberos de Palma, la unidad de emergencias del 112, Protección Civil de Marratxí, Policía Nacional y, por parte de la Guardia Civil, se han desplazado el SEPRONA y la unidad de Tráfico.
Estos efectivos han movilizado varios vehículos que, a petición de los más pequeños, no han dejado de hacer sonar sus sirenas durante la mañana. Los niños han podido observar, aprender y tocar los vehículos y el material que utilizan normalmente los agentes y voluntarios de los cuerpos de seguridad y emergencias.
La fiesta de hoy ha servido como clausura del programa de Educación Vial que cada año organiza la Policía municipal en todos los niveles educativos y centros del municipio. Este curso se han beneficiado del programa más de 4.600 alumnos de Marratxí.
La jornada ha contado con la presencia del alcalde, Tomeu Oliver, el regidor de seguridad ciudadana, Joan Coll, la regidora de Participación Ciudadana, Antònia Coll, y el inspector de la policía de Marratxí, Antoni Ledesma.
El alcalde ha señalado la importancia del programa de Educación Vial que desarrolla la Policía de Marratxí para “concienciar desde las edades más tempranas de la importancia de unos buenos hábitos como conductores y peatones” y ha destacado la Diada como una “buena manera de enseñar a los más pequeños que los policías o los bomberos están para ayudar a las personas”.
Por su parte, Antoni Ledesma ha expresado su gran satisfacción ante la participación que registra cada año este evento y ante los buenos resultados que obtiene curso tras curso el programa de Educación Vial.