El grupo econacionalista denuncia el voto en contra del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Marratxí, durante la sesión plenaria de este martes 27 de mayo, a su propuesta de convocar un foro ciudadano abierto a los vecinos del Pont d’Inca en el que valorar la situación del núcleo poblacional y proponer soluciones.
Més per Marratxí pone de manifiesto la «carencia de espacios libres y de instalaciones en general, especialmente de deportivas en Es Pont d’Inca». Señalan que cuenta con una única plaza y un pequeño parque infantil y como instalaciones socioculturales con el edificio Erika, una biblioteca, y la vieja escuela. «Es un núcleo urbano pensado más para los coches que para las personas, es un gran aparcamiento, incluso en la plaza de la Iglesia», destacan.
Consideran que el tráfico que genera la carretera de Inca, a pesar de la existencia de la autopista, «es muy alto» y «afecta negativamente a los ciudadanos que viven». Entienden que esta situación dificulta que «muchos de los negocios que abren lleguen a consolidar». Recuerdan que «en las normas subsidiarias vigentes está prevista la conversión de esta carretera con un bulevar desde Es Pont d’Inca hasta el Figueral, con un carril bici y espacio para los peatones, que pacifique el tráfico y se parezca más a una calle de un pueblo que a una carretera». La situación es que «lamentablemente este es uno de los proyectos que aparecían en las normas mencionadas y que han quedado en los cajones».
Los concejales de Més per Marratxí se muestran especialmente descontentos porque «Todo esto contrasta con el hecho de que los terrenos de Son Bonet, propiedad del Govern, tienen mucho espacio libre además de unas instalaciones deportivas y socioculturales excelentes, que están absolutamente abandonadas y en progresivo estado de degradación».
La propuesta que presentaron en el pleno pretendía abordar de lleno toda esta realidad desde la «consciencia de que no es fácil la solución de todos estos problemas», pero entendiendo que «estos contrastes y contradicciones no se pueden mantener»
Sus responsables son claros al afirmar que «ante esta situación no se puede mirar a otro lado y continuar como si nada». El voto en contra del equipo que dirige el consistorio ha llevado que sea desestimada su propuesta. «Gobernar supone afrontar los problemas de la ciudadanía e intentar resolverlos», sentencian.