‘Outer Banks’ está de vuelta con su segunda y explosiva temporada en Netflix. El grupo de adolescentes cazatesoros se ven envueltos en una aventura todavía más peligrosa con secuestros, disparos, caimanes, barcos que saltan por los aires, trepidantes persecuciones y muertes, aunque esta segunda temporada ha demostrado creer fervientemente en la resurrección de los muertos.
‘Outer Banks’ asegura tener cuerda para rato y prevé seguir entreteniendo a su legión de fieles durante varios años más a pesar de que la la tercera temporada está todavía sin confirmar. El éxito de la serie y el final de la segunda parte con todos los frentes abiertos dejan bastante claro que, seguramente el próximo verano, volveremos a tener noticias de John B (Chase Stokes) y sus amigos.
Si la primera temporada de la serie fue intensa, la segunda ha pisado el acelerador ofreciendo un ritmo frenético en el que el espectador no tiene tiempo ni para pestañear. Los acontecimientos se suceden de manera vertiginosa arrastrando a los protagonistas a las situaciones más complicadas y poniéndolos al borde de la muerte en más de una ocasión.
Secuestros, amenazas, bombas, mordiscos de caimanes, peleas por doquier y tiros a diestro y siniestro marcan el día a día de este grupo de adolescentes encabezados por John B. Routledge. Pese a los peligros que los rodean tienen tiempo para vivir romances igual de intensos con los que mantener encandilados a los miles de fans de la serie.
La apuesta por un ritmo tan exigente, cuando se pretende hacer una serie de al menos cuatro o cinco temporada, puede llevar a la extenuación y a tener que repetir patrones.
En esta segunda temporada se ha recurrido en exceso a llevar a los personajes al punto de parecer muertos e incluso más, a darlos por muertos para que luego reaparezcan en aras de ofrecer un supuestamente impactante giro. Esto es peligroso porque los espectadores pueden acaban por no tomarse nada en serio y a deslucir los cliffhangers.
La producción mantiene la esencia con la que arrancó haciendo que el hilo argumental de la aventura sea la «búsqueda del tesoro» y uniendo el oro del Royal Merchant con un nuevo y valiosísimo objetivo: la cruz de Santo Domingo. Incluso afinan las conexiones con un nombre clave en toda la historia: Denmark Tanny.
Chase Stokes, Madelyn Cline, Madison Bailey, Jonathan Daviss, Rudy Pankow, Austin North, Charles Esten y Drew Starkey son los principales protagonistas de la serie de Netflix.