Me disculpo por enviar una foto desagradable. Lo es, pero he elegido la menos asquerosa. Además, en vivo es mucho más nauseabundo. Soy Carlos de Palma. No sé si es una percepción mía, pero de un tiempo a esta parte estoy volviendo a ver muchas cacas de perros por las aceras cada vez que salgo a dar un paseo.
Hace un tiempo comentaba con unos amigos de Madrid que en Palma veía bastante responsabilidad con los perros, pero últimamente no es así. Me encuentro deposiciones de canes por todos lados y es muy desagradable, antiestético y nada higiénico.
Por favor, las calles no pueden convertirse en un territorio sin ley en el que los perros hagan sus necesidades en cualquier sitio y se queden ahí. He observado a personas que los ponen incluso en la entrada de un paso de peatones y luego se marchan tan panchos dejando ahí el regalito. También he visto a gente recoger lo grande y dejar todos los adoquines con los restos chafados y untados.
No es culpa de los perros sino de quienes deberían educarlos y guiarlos. Seguro que en su casa no hacen sus necesidades en medio del salón o encima del sofá. Pues la calle es de todos y debería respetarse y cuidarse.