Tras el debate de los presupuestos, Marratxí aprobaba la adquisición (vía permuta de 2 solares y 90.000€), de los terrenos donde se encuentra sa Cova de Son Caulelles, un monumento funerario clasificado como BIC por el Consell de Mallorca.
También hubo unanimidad en la aprobación inicial de la modificación de la Ordenanza Reguladora del precio público para la prestación de los servicios de ayuda a domicilio y el servicio de comidas, con el agradecimiento del alcalde Canyelles a los trabajadores de los Serveis Socials del Ajuntament, y unas mociones que siguieron, relativamente, adelante.
Respecto a la proposición del Pi, Neus Serra, de cambiar el reparto de la recaudación del impuesto ecológico por parte del Consell de Mallorca, Canyelles le recordó que es la FELIB quien cuestiona el tema y es un acuerdo entre todas las administraciones municipales, por lo que se debería debatir en otro foro. Aún así, y a propuesta del PP, se modificaron dos puntos para que la moción planteara más beneficios para Marratxí, al final fue aprobada por unanimidad.
La siguiente moción, también de Serra, relativa a “lograr una ordenación urbanística de suelos urbanos y urbanizables equilibrada, viable y sostenible”, se desestimó, puesto que el equipo de gobierno considera que ya está gestionando la organización urbanística de forma viable y sostenible.
Al margen de cuestiones supramunicipales, se comentaron los carnavales, el entierro de la Sardina y el programa de la Fira del Fang, que ya celebra 33 ediciones. Un concierto con instrumentos de barro y una mesa redonda de artesanas es el punto novedoso de este año. Y también en homenaje a la mujer se reconoce la figura de Maria Antònia Carrió, una excepcional ceramista que formó parte del jurado de la última Bienal de Carámica de Marratxí, y que ha fallecido recientemente.
Una información de Blanca Garau