L’Arancina Handbol Mallorca ofrece una charla con uno de sus jugadores, Toni Boutaour.
L’Arancina Handbol Mallorca lo forman muchos jugadores procedentes de diversos lugares y también tenemos jugadores mallorquines.
El club presenta a Toni Boutaour quien tiene 27 años lleva el dorsal 10 en la zamarra y destaca por ser un jugador muy polivalente, es decir, que el míster Sergio Sevilla tanto lo puede utilizar en las tareas defensivas como las ofensivas.
Acerca de la actualidad del equipo, Boutaour ha querido comentar lo siguiente: “Hemos tenido muchas lesiones en las últimas semanas y poco a poco estamos recuperando gente, lo cual nos ha permitido mejorar un poco en algunos aspectos y rendir mejor como equipo”.
¿Cuáles fueron tus inicios en el mundo del balonmano?
“Mirad, mis comienzos en el balonmano fueron con seis años y mi primer entrenador fue Pedro del Brío que curiosamente es compañero del equipo, de hecho, el hecho de coincidir con él en el equipo es algo muy especial. En el balonmano en sí comencé porque mi hermano jugaba en la base de mi colegio y recuerdo que los iba a ver entrenar; después comencé a jugar desde prebenjaminas hasta ahora. Reconozco que cuando miras hacia tu interior como jugador que tienes muchos años, me acuerdo de las diadas que se hacían instituciones como el Consell de Mallorca donde jugábamos muchos clubes que gracias a esas diadas ibas creando una familia dentro del balonmano”
Nos contabas que Pedro del Brío fue tu primer entrenador. ¿Cómo estás viviendo que ahora, Pedro sea tu compañero de vestuario?
“Si, lo he visto en casi todas las facetas, ya que desde el principio fue mi primer entrenador, he llegado incluso a jugar contra él en sus últimas temporadas en activo y ahora nos toca compartir vestuario”.
El año pasado jugabas en Segunda Nacional y este año es tu primer año en Primera Nacional: ¿Cómo te estás viendo en esta temporada de debut?
“Es un balance muy positivo, ya que llegué con el equipo prácticamente formado y consolidado. Esa circunstancia, provocó que me autoexigiera a mi a dar un poco más de mi no solamente en los entrenamientos para adaptarme lo más rápidamente posible a lo que quería el míster y considero que he encajado muy bien con el equipo porque todos nos llevamos muy bien donde somos un bloque va a una en todos los sentidos. En cuanto a competición, me he sentido muy bien
y se nota un cambio en el juego. Todo es mucho más igualado y el ritmo de partido que es mucho más intenso”.
¿Cómo estás viendo al equipo?
“Considero que tenemos un equipo muy equilibrado en algún que otro aspecto y quizás nos falta algún perfil de jugador que no tenemos como pueda ser un bombardero que lance desde la línea de nueve metros. Aunque con nuestras diferencias somos jugadores que tenemos una envergadura similar y a nivel defensivo considero que se nota ese cambio”
¿Cómo te definirías como jugador?
“(Risas) Me poneis en un aprieto… (Risas) Es complicado definirse a uno mismo, soy cabezón y un jugador muy constante”.
¿Jugaste siempre en el Mata de Jonc de Palma? ¿Qué recuerdos guardas de tu etapa en el Mata de Jonc?
“Aunque la mayor parte de trayectoria ha estado ligada al Mata de Jonc. Mis primeros pasos fueron en el Colegio Santa Isabel, pero después migré al Mata de Jonc, un colegio y un club que me lo ha dado todo, del que guardo buenos recuerdos, allí tengo mis mejores amigos y forman parte de mi vida. En definitiva, estoy muy contento porque tengo buenos recuerdos”.
En el balonmano en general y entre los jugadores se crean un vinculo muy fuerte. ¿Qué opinas, en este sentido Toni?
“Es cierto que pasas ocho u nueve meses juntos, ya sea porque entrenas cada día, viajas, compartes habitación y son nueve meses donde creas un vínculo muy bonito. Incluso cuando coincides con otros jugadores que ahora son tus rivales, pero tienes un vínculo. Personalmente, lo notas muchos cuando hay malos momentos”.
¿Quién se esconde dentro de Toni Boutaour cuando no juega?
“Soy ingeniero informático y mi trabajo es dedicarme a trabajar en una consultaría técnica y me dedico a los análisis de datos. Básicamente, me encargo de transformar los datos para que diversos perfiles, ya sean empresas o analistas puedan llegar a tomar decisiones, porque no olvidemos que estos datos que están esparcidos en aplicaciones. Los perfiles que se encargan de trabajar con esos datos, homogenizarlos y organizarlos de forma que puedan ser accesibles; aquí es donde radica nuestro trabajo”.
¿Qué papel juega el balonmano en tu vida? ¿Cómo lo compaginas con tu vida laboral?
“Muy sencillo, el ingeniero es la persona que se encarga de solucionar las personas y es una persona muy organizada. Tienes que distribuir tu tiempo entre la formación, la vida familiar y el deporte”.
¿Cuál es la relación que tienes con Marruecos?
“Reconozco que soy un poco de mezcla, es decir, mi padre es de Marruecos, concretamente, de Tánger mientras que mi madre es de un pueblo de Linares (Jaén y yo nací allí, pero de muy pequeño vinimos a Mallorca. Aunque mi familia paterna es marroquí nunca he visitado Tánger y es una cosa pendiente que quiero realizar un viaje con mi padre porque hace años no viaja”.
Por último, esperamos que con esta entrevista podáis conocer un poco más a nuestro jugador Toni Boutaour.
